En una unión entre el arte contemporáneo y el folklor mexicano, Clase Azul México, creó historia con el lanzamiento de Clase Azul Tequila Edición Limitada x Eduardo Sarabia. Esta exclusiva licorera se presenta en dos variantes: “Dorado”, con elementos decorativos resaltados en oro de 24 quilates, y “Color”, que recrea motivos animales en verde y rojo vivos, acentuados con oro de 24 quilates, creando una vibrante gama de colores junto al icónico azul cobalto de Clase Azul.
El evento exclusivo de lanzamiento ocurrió en la Galería Hilario reuniendo a cerca de 80 invitados, entre ellos personajes como Eduardo Sarabia, Eduardo Granja, hermanos cineastas Mariana y Santiago Arriaga. La noche inició con la degustación de dos cócteles creados específicamente para la ocasión: “Fronteras imaginarias”, elaborado con Clase Azul Tequila Plata, y “Terciopelo Blanco”, con Clase Azul Tequila Reposado.
Los invitados tuvieron el privilegio de degustar por primera vez el exclusivo destilado Clase Azul Tequila Edición Limitada x Eduardo Sarabia, un licor creado específicamente para esta colaboración. Esta edición, compuesta por 450 botellas, surgió de una “conexión espiritual” con la marca como menciona Sarabia; un vínculo entre sus propios valores y su visión del arte mexicano, y los valores de Clase Azul México.
“Con este tequila quería representar la maestría del artista”, menciona la Maestra Destiladora Viridiana Tinoco. “La familia de Eduardo dejó México por Estados Unidos, él creció en Los Ángeles y pasó parte de su juventud en Rusia, pero al final volvió a la tierra de sus ancestros y vino a México a crear su obra y compartirla con el mundo”. La combinación de estos tres tequilas da vida a una mezcla exquisita, con aromas de nuez y cáscara de mandarina, tonos herbáceos y un paladar que resalta notas de miel de agave, yerbabuena y mandarina madura.
Esta edición limitada refleja el estilo lúdico y el lenguaje artístico de Eduardo Sarabia, decorando la botella con una amplia gama de personajes folklóricos y motivos de gran relevancia personal y cultural. El frente de la botella presenta pares cruzados de picos y palas, junto con la cara de una moneda de dos pesos acuñada en el año de nacimiento del artista, que han sido leitmotifs presentes en su estilo y obra. En el reverso se encuentran retratos alegóricos de un perico, un gallo y una chiva, que son personajes de las narrativas musicales y populares de la Sinaloa natal de su familia.
El tequila y el arte contemporáneo mexicano se fusionaron en una noche memorable, marcada por la distinción y la exclusividad de esta colaboración entre Eduardo Sarabia y Clase Azul.
