Hace apenas un mes que se filtró la noticia de que Adele se había separado de su marido Simon Konecki, pero parece que la cantante ya se ha puesto manos a la obra para organizar su nueva dinámica familiar ahora que el padre de su único hijo y ella comenzarán a hacer vidas separadas. Por el momento la estrella de la música ha desembolsado algo más de diez millones de dólares en una mansión en Beverly Hills de cinco habitaciones situada a unas manzanas de distancia de la propiedad que ya posee en esa misma zona y que adquirió tres años atrás por nueve millones y medio.
Según el portal Variety, la creencia generalizada es que Simon se mudará ahora a esa nueva casa que la famosa intérprete británica ha comprado al productor Michael Hertzberg, que en un principio pedía por ella 13 millones. La vivienda cuenta con todas las comodidades esperadas, como un patio interior protegido de las miradas de curiosos y una piscina, y se encuentra en uno de los barrios favoritos de la celebridades y que cuenta con vecinos tan famosos como Cameron Diaz o Katy Perry.