El reconocido actor mexicano, Enrique Álvarez Félix, único hijo de la icónica María Félix, dejó un legado indiscutible en la industria del entretenimiento nacional.
Su trágica muerte el 24 de mayo de 1996 en la Ciudad de México conmocionó al público y dejó un hueco imposible de cubrir en el medio del espectáculo. Pero más allá de su carrera y su relación con “La Doña”, su vida privada y su residencia en Polanco, Miguel Hidalgo, CDMX, capturó la imaginación del público y de la prensa de la época.
El hogar de Enrique Álvarez Félix, un espacio de lujo y buen gusto
A pesar de que el departamento de Enrique no rivalizaba en tamaño con las residencias de su madre, el estilo y la decoración de su hogar hablaban de una sofisticación y un buen gusto heredados. El interior estaba adornado con cuadros y retratos, tanto de él como de su madre, mostrando la profunda conexión y el impacto que tuvo María Félix en su vida y carrera.
Cada rincón del departamento, desde la recámara con su balcón con vista a la exclusiva zona de Polanco hasta la sala adornada con estatuillas, reflejaba una excentricidad y una elegancia innatas. Las imágenes que han sobrevivido, gracias a los esfuerzos de los clubs de fans de María Félix, ofrecen un vistazo a la vida íntima de Enrique, un misterio ahora parcialmente revelado.
Cómo fue la relación entre María Félix y su hijo
La relación entre Enrique y su madre, aunque parecía armoniosa en público, estaba llena de desafíos. Enrique reveló en una entrevista en 1994 que, a pesar de las frecuentes discusiones motivadas por sus fuertes personalidades y el compartir el mismo signo zodiacal, Aries, existía un profundo respeto mutuo. Enrique siempre estuvo dispuesto a ceder ante su madre, lo cual da prueba de la importancia de su figura materna en su vida.
Contrario a la creencia popular, Enrique aclaró que su carrera no fue un camino fácil pavimentado por su madre. En lugar de ello, enfatizó que su éxito se debía a su propio trabajo y dedicación, desmintió así cualquier noción de influencia materna en su trayectoria profesional.
Los últimos momentos en el departamento
Enrique Álvarez Félix falleció en su departamento en Polanco debido a un infarto agudo al miocardio, justo cuando se encontraba en medio de varios proyectos importantes. Este evento inesperado significó la pérdida de un talento destacado y un fuerte impacto emocional en su madre, quien se encontraba en París en el momento del suceso.
Este departamento fue testigo del éxito profesional de Enrique y de su vida personal marcada por la complejidad de las relaciones familiares y los rumores sobre su orientación sexual. A pesar de los desafíos, Enrique mantuvo amistades profundas dentro de la industria, con quienes compartía sus penas y amores con figuras como Julissa, quien ha expresado la autenticidad y el carácter divertido de Enrique.
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El departamento de Enrique Álvarez Félix en Polanco además de haber sido un espacio de lujo y estilo también fue un hogar lleno de historias, algunas conocidas y otras apenas insinuadas, de un personaje que, a pesar de las controversias y desafíos, dejó una huella imborrable en el cine y la televisión mexicanos.