Gran interpretación dio Céline Dion desde lo alto de la Torre Eiffel, donde cantó en público con el himno al amor “Hymne à l’ amour” de Edith Piaf.
La cantante deslumbró a todos en el cierre de la ceremonia inaugural, donde demostró que su voz y su talento siguen intactos. Cabe mencionar que desde que comenzó su lucha contra la enfermedad del Síndrome de la Persona Rigida, no había vuelto a los escenarios, incluso canceló su gira.
Ahora, Céline Dion regresó más fuerte que nunca para cantar en la apertura de los juegos. Para la ocasión, la canadiense lució un elegante vestido plateado de la marca de Dior. La prenda brillante tela de georgette de seda contaba con cuello alto y mangas largas, bordado con perlas brillantes y adornado con 500 metros de flecos con miles de perlas plateadas.
Y como era de esperarse, la famosa recibió una cuantiosa cantidad por su presentación. Según el sitio especializado en espectáculos TMZ, Céline Dion recibió una suma de 2 millones de dólares.
Céline puso broche de oro a las cuatro horas de ceremonia celebrada a lo largo del río Sena, justo en el momento en el que la llama Olímpica se elevaba en un globo aerostático sobre los Jardínes de las Tullerias, cuando en medio de la estructura de hierro que se encontraba sobre el sitio, una potente voz aparecio en escena y entonó la melodía.
Céline cantó debajo de los anillos olimpicos, en el primer piso de la Torre Eiffel, y aunque su intervención fue breve, el público la recibió con una cálida ovación.