Por Alejandra Morón Instagram: @moronitas
No es común que Bárbara Mori hable de su vida privada, mucho menos de lo que vivió en su niñez, pero esta vez quiso abrir su corazón a Lety Sahagún y Ashley Frangie a quienes les compartió diversas etapas de su vida. La actriz compartió algunos pasajes de su vida, desde la infancia hasta su camino a la adultez. La plática con las conductoras del podcast “Se regalan dudas” dejó al descubierto la parte más dura de la vida de Bárbara Mori, quien ha querido mostrar la verdadera Bárbara que es.
“La gente de pronto no sabe quién está detrás del nombre ¿no?, y yo, a pesar de ser una persona pública o famosa, trato de mantener mi vida privada, súper privada, porque pues lo poquito que me queda es mío, ¿no?”, comenzó su conversación. “Y he compartido poco lo que soy, de dónde vengo, cómo crecí, y tuve una infancia súper, súper dura, que me marcó muchísimo en todos los sentidos. O sea crecí sin mamá, y crecí con un padre alcohólico y tuve una infancia súper dura, triste, oscura, violenta, ¿sabes? Como muy alejada del amor”, reveló. “Y esta infancia obviamente fue muy dolorosa y cuando pude salirme de mi casa, en cuanto pude empezar a trabajar, empecé a trabajar a los 14 años, y trabajé hice de todo un poco, fui mesera en una pizzería, repartía volantes en un semáforo, fui booker en una agencia de modelos, bailé en antros. O sea hice de todo un poco para poder ahorrar y salirme de mi casa”, compartió.
Bárbara Mori, la fama y ‘Rubí'
“Cuando pude y tuve la oportunidad, que tenía ya 17 años, me salí y te digo hice un chorro de cosas y a tratar de buscar ese lugarcito en el mundo en donde me sintiera bien, ¿no? Estaba muy enojada con la vida”, compartió. “Empecé a modelar, porque mi belleza física me abrió puertas en el modelaje, y cuando empecé a estar frente de la cámara me dí cuenta de que quería ser actriz y que me gustaba y que lo que me provocaba la cámara era demasiado interesante, entonces yo dije ' quiero ser actriz’ y me metí a estudiar y así fue como actuar y resultó que a los cinco meses de estar estudiando en el CEFAT me quedo en una novela, y luego en otra y empecé a trabajar y a trabajar y no paré", recordó. “Hice como 10 telenovelas y nada, nunca me imaginé llegar a donde llegué. Si me voy hacia atrás en el tiempo esa mujercita que empezó a tratar de abrirse paso para salirse de esa violencia en la que vivió, pues era una mujer que estaba muy enojada con la vida y me refugiaba mucho en mi carrera”, expresó.
“Hasta que de pronto hice una novela que fue como el éxito más cabrón del momento, que fue ‘Rubí', cuando hice ‘Rubí' estaba en el momento más impresionante de mi carrera donde tenía todo lo que según la sociedad te lleva a la felicidad, fama, dinero --porque me pagaban muy bien-- reconocimiento...”, dijo. “Uno ve de pronto y dice ‘ay, yo siento que los artistas -- como son famosos-- tienen dinero, les va poca madre, pues todos son muy felices, y todo está muy bien’, pero no, la realidad era que pues a mí me rompieron mucho por dentro cuando era chiquita y empezar a juntar mis pedacitos me costó mucho trabajo, darme cuenta de que necesitaba empezar a mirar hacia adentro fue algo que empezó a traerme una transformación”, reconoció. “Yo conocí el amor a base de golpes, abandono de mi madre, entonces para mí el amor era eso y yo me empecé a relacionar, no solamente con los hombres sino con la gente, a través de esas relaciones destructivas y tóxicas, y eso es lo que de pronto tú empiezas a atraer porque desgraciadamente cuando somos chiquitos se van generando creencias, ¿no?”, comparte Bárbara Mori. https://www.instagram.com/p/B1t5Re8nuVA/
La creencia que llevó Bárbara Mori a través del tiempo
“La creencia que me acompañó en mi vida y que se volvió como un statement en mi vida es ‘tú no eres lo suficientemente buena para que mamá se haya quedado, ni para que papá te quisiera’, entonces como crecí con esta creencia, pues no eres lo suficientemente buena para tener un hombre que te respete, que te quiera, te valore y te cuide porque ni siquiera tú ni siquiera te valoras, ni te respetas, ni quieres, ¿sabes? y cuando me dí cuenta de eso empecé a mirar hacia adentro y decir ‘ok, ¿qué está pasando aquí? Por qué estoy tan enojada, por qué reacciono tan enojada con la vida cuando realmente tienes todo’”, dijo. https://www.instagram.com/p/B1z3l-pFDlY/
El cáncer en su vida
“Yo me acuerdo cuando tenía 29 años me dio cáncer, ahorita el cáncer es muy común, pero en aquel entonces --tengo 41 años-- no era tan común que las mujeres jóvenes tuvieran cáncer, entonces cuando el doctor me dijo ‘tienes cáncer’ obviamente lo primero que piensas es ‘me voy a morir’. Y ‘No, no te vas a morir, estás súper a tiempo, te podemos operar, te lo quitamos y tal’ y yo le dije “ah bueno, tengo justo el domingo, era un viernes, justo el domingo me voy a Canadá a estudiar inglés, tengo ya todo pagado, la escuela y todo, y voy a estar un mes allá" y me dijo “Ah, no te preocupes, regresando te opero”, recordó. “Entonces me fui a mi viaje con mi cáncer, me fui sola con mi cáncer, y ese viaje fue muy fuerte para mí, porque obviamente me pasaron muchas cosas por mi mente, por qué me quejaba ¿sabes?, o sea por qué te quejas cuando tienes una vida, cuando tienes un hijo, cuando tienes salud, cuando tienes trabajo, cuando estás bien, qué te hace falta, por qué te estás quejando”, abundó. https://www.instagram.com/p/B1ZFGB5ni74/ “Yo me quejaba tanto que de pronto sentí como que ‘ok, ahora sí esta es una enfermedad, ahora sí te puedes quejar. Entonces como que a mí me abrió los ojos y entonces empece a agradecer y dije, ‘ok’, salí y me operaron, todo bien. No necesité quimioterapias y dije, ‘wey agradece que estás bien, agradece que estás viva, por qué estás tan enojada, por qué sientes tanto enojo dentro de ti, mira hacia adentro”, compertió. “Cuando llegó ‘Rubí' a mi vida, no solo fue importante para mi carrera como actriz, sino para mí como persona, porque yo experimenté estar en el spotligth donde pues pensé que estando ahí iba a tener la felicidad que estaba buscando, ¿no? porque nos hacen creer que la felicidad es la fama, el dinero, el éxito y no lo es. Yo estaba ahí y yo llegaba a mi camerino todas las mañanas y cerraba la puerta y me miraba al espejo y me ponía a llorar, se me salían las lágrimas, me sentía vacía por dentro porque obviamente a mí me rompieron tanto de chiquita que no había amor propio, me relacionaba nocivamente con las personas, había una absoluta falta de amor propio en mí", expresó. “En ese momento, en donde estaba en ese lugar tan importante y me sentía tan vacía, dije yo necesito pensar, necesito entender porque teniendo todo esto no soy feliz y ahí fue cuando empecé a buscar ayuda, a leer libros, a entender de qué va la vida, a preguntarme ¿realmente yo estoy donde quiero estar? empecé a decir ¿quién soy yo?”, ahondó. https://www.instagram.com/p/B0YezGwFgXa/ “Empecé a mirar hacia adentro y empecé a buscar retiros que me hicieran hacer ejercicios para trabajar, para conectar, para perdonar”, reconoce. “Yo crecí viendo a un padre violento toda mi infancia, entonces yo me enojaba, entonces reventaba la mesa, tiraba y gritaba y me enojaba y entonces lastimaba con palabras a la gente, yo reaccionaba así cuando las cosas no salían como yo quería. Cuando hice ese primer retiro, me dí cuenta que yo no quería ser esa persona, que yo no era esa persona violenta, que yo era una persona amorosa”, aseveró. La plática dura casi una hora, donde además de su difícil infancia, Bárbara Mori habla de su fundación, su manera de pensar en la actualidad y su filosofía de vida.
