Blake Lively y Justin Baldoni tendrán que tomar otra estrategia sobre su conflicto, y es que un juez ordenó a ambos actores que dejaran de lado su guerra mediática. Dicha decisión se tomó en un juzgado en Nueva York, donde la modelo y el director se enfrentaron en la corte por primera vez desde que se demandaron mutuamente.
¿Qué dijo el juez del caso entre Blake Lively y Justin Baldoni?
Durante la audiencia preliminar que se realizó este lunes 3 de febrero en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, el juez Lewis Liman abordó el tema y advirtió que podría acelerar el juicio si ambas partes no cesan su batalla en los medios.
El magistrado también recordó a los abogados que deben cumplir con las Reglas de Conducta Profesional de Nueva York, las cuales prohíben declaraciones públicas con una “probabilidad sustancial” de influir en el jurado.
Por su parte, Blake Lively y su equipo legal solicitaron al juez que impida a Bryan Freedman realizar declaraciones públicas que puedan afectar la imparcialidad del juicio. También expresaron preocupación por un sitio web lanzado recientemente por Justin Baldoni y su equipo, que parece estar diseñado para reforzar sus acusaciones contra la actriz.
Asimismo, el abogado de Baldoni afirmó que sus clientes están “devastados financiera y emocionalmente”. El juicio está programado para marzo de 2026.
Michael Gottlieb y Esra Hudson, abogados de Lively, declararon a los medios de comunicación que están satisfechos con el resultado de la audiencia y se encuentran “ansiosos por avanzar con el proceso de descubrimiento en este caso”.
¿Por qué se demandan Blake Lively y Justin Baldoni?
En diciembre pasado, Blake Lively presentó una demanda contra Justin Baldoni, alegando que la acosó sexualmente durante el rodaje de ‘Romper el círculo’ y que, tras denunciarlo, él lanzó una campaña de desprestigio en su contra. La demanda también menciona a dos empleados de Wayfarer Studios, la productora del actor y a dos de sus publicistas.
Posteriormente, el director respondió con una contrademanda de 400 millones de dólares contra Lively, su esposo Ryan Reynolds y su publicista, acusándolos de difamación, así como de intentar tomar el control de la película y su promoción.