La conductora de “Hoy”, Tania Rincón, ha estado en el ojo del huracán de los rumores sobre su vida sentimental después de su divorcio de Daniel Pérez, con quien compartió más de una década de matrimonio y dos hijos.
Las especulaciones acerca de un posible nuevo romance han llevado a Tania a romper el silencio y abordar directamente el tema. Aunque la conductora lo hizo de una manera muy particular.
Un divorcio anunciado
En marzo del presente año, Tania Rincón hizo pública su separación de Daniel Pérez a través de un comunicado en redes sociales, lo que sorprendió a sus seguidores.
Después de once años de matrimonio, la pareja decidió poner fin a su relación en enero del mismo año. Aunque la noticia fue inesperada, ambos han dado señales de seguir adelante con sus vidas.
Las “Faisy Nights” de Tania Rincón
Recientemente, Tania Rincón fue invitada al programa “Faisy Nights”, donde el conductor Faisy no dudó en tocar el tema de los rumores sobre la vida amorosa de la presentadora.
Entre risas y preguntas ingeniosas, Faisy buscó obtener detalles sobre algún posible romance, pero Tania manejó la situación con su característico buen humor.
Durante la entrevista, Faisy cuestionó a Tania sobre su nuevo novio, fiel a su estilo, el conductor utilizó preguntas muy peculiares para obtener una respuesta.
Ante la pregunta sobre su pareja actual, Tania respondió de manera lúdica, mencionó a un “Fernando que graba la telenovela de ‘El Maleficio’”. La referencia a Fernando Colunga desató risas, y Tania continuó bromeando al respecto.
Al abordar el tema de los rumores, Faisy también intentó confundir a Tania respecto a su relación con un productor de TUDN, Pedro Pereyra. Sin embargo, la conductora desmintió también de manera lúdica cualquier especulación y aseguró que no quería malentendidos.
Tania Rincón, tras su divorcio, se encuentra en el centro de la atención mediática con especulaciones sobre su vida sentimental. Su participación en “Faisy Nights” no solo dejó en claro su postura frente a los rumores, sino que también reveló su capacidad para manejar el escrutinio público con gracia y humor.