Xóchitl Gálvez dio un paso importante en su carrera política al recibir la constancia que la acredita como la candidata oficial del Frente Amplio por México (FAM), una alianza conformada por el PRI, PAN y PRD, para las elecciones presidenciales del 2024.
Además de la política, una de las aficiones de la senadora por el Partido Acción Nacional (PAN), es el futbol. Xóchitl Gálvez es conocida por su pasión inquebrantable por el equipo de fútbol Cruz Azul.
Xóchitl Gálvez, una ferviente cruzazulina
La candidata a la Presidencia de la República no ha ocultado su devoción por el equipo Cruz Azul.
A pesar de las derrotas y momentos difíciles, la senadora ha demostrado su amor por “La Máquina” en numerosas ocasiones, incluso portando con orgullo la camiseta celeste en el recinto legislativo. Su compromiso con el equipo ha llegado al punto de afirmar públicamente que ha llorado por las constantes derrotas del club de La Noria.
En el estadio azul! pic.twitter.com/mjEce4YVtp
— Xóchitl Gálvez Ruiz (@XochitlGalvez) January 17, 2015
Incluso, en su cuenta oficial de Twitter, Xóchitl Gálvez incluye la frase “Muero por el Cruz Azul”, lo que sin duda deja en claro su lealtad total al equipo.
Desde que comenzó su trayectoria como funcionaria pública en el sexenio de Vicente Foz, Xóchitl Gálvez ha lanzado apuestas en partidos importantes o clásicos con otras personalidades de la política o figuras públicas en apoyo al Cruz Azul, aunque en varias ocasiones ha tenido que enfrentar la derrota.
Uno de los temas en los que ha sido activista es la construcción de un nuevo estadio exclusivo para el Cruz Azul, una causa que ha abrazado con entusiasmo y dedicación.
La cruzazulina que quiere ser Presidenta
Xóchitl Gálvez, cuyo nombre completo es Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz, nació en Tepatepec, Hidalgo, el 22 de febrero de 1963.
Su historia de vida está marcada por la determinación y el esfuerzo. Creció en un entorno modesto y tuvo que vender gelatinas en el mercado de su pueblo natal para costear sus estudios secundarios. A pesar de los desafíos, demostró una tenacidad inquebrantable y continuó su educación.
Después de completar la secundaria en la comunidad de Mixquiahuala en Hidalgo, Xóchitl Gálvez se trasladó a la Ciudad de México en busca de oportunidades educativas y laborales. Al mismo tiempo que estudiaba, trabajaba para mantenerse y comenzó su carrera como telefonista antes de convertirse en pasante en el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).