Vicente Fernández, junto a su hijo Alejandro y su nieto Alex, nos abrió las puertas de su rancho Los Tres Potrillos, en Jalisco, y posaron juntos, por primera vez, para CARAS. Y con esta frase nos recibió...
Por María del Mar Barrientos
“Cuando escuchas la voz del que lleva tu sangre...te sientes inmortal”
Vicente Fernández
Don Vicente, ¿cómo está?
Muy agradecido. Primeramente le doy gracias a Dios por estar bien y por los hijos y los nietos que me ha dado y que ellos hayan seguido mis pasos.
¿Cómo se dio cuenta de que su hijo Alejandro quería cantar?
Yo ni sabía que Alejandro cantaba. Sabía que de vez en cuando cantaba en la escuela, pero yo la verdad nunca iba a verlo. Fue en una ocasión en la que estaba filmando una película que se llamaba Por tu maldito amor, que me dijo que si me podía cantar un tema. Escogió la de “Perdón” y dije: “Ah caray, ¿de cuándo acá tú cantas?”. Después hice un disco con varios artistas y ahí quise que Alejandro interpretara una canción a dueto conmigo, que se llamaba, “Amor de los dos”, y fue un trancazo. Alejandro estaba estudiando y varios empresarios me pedían que lo llevara a las presentaciones. Ahí empezó su carrera. Le daba consejos y al principio siempre lo regañaba mucho, sin embargo, ahora lo regaño mucho más.
“De mi hijo Alejandro admiro su profesionalismo, su modo de ser en el escenario. Ahí es donde se cruza el Vicente con el Alejandro. ¿Y cómo no?, si tiene mi escuela”, Vicente Fernández.
¿Qué regaños le hacía usted a su hijo Alejandro?
No tenía nada de tablas y cantaba con la cabeza para abajo, y lo regañaba y me pasaba el tiempo diciéndole: “Voltea para arriba, ríete, tienes muy bonitos dientes”.
¿Qué es lo que más admira de su hijo?
De mi hijo Alejandro admiro su profesionalismo, su modo de ser en el escenario. Ahí es donde se cruza el Vicente con el Alejandro. ¿Y cómo no?, si tiene mi escuela. La verdad los dos me salieron muy obedientes. Por eso, mi nieto Alex va por muy buen camino y por lo mismo, mi hijo Alejandro casi, casi me alcanza (risas).
¿Cómo se siente que sus nietos hayan heredado el gusto por el canto?
Yo me siento como pavorreal, porque mis cinco nietos cantan hermoso, aunque nada más Camila y Alejandro se dediquen a esto.
¿Cómo son esas comidas familiares de los Fernández que presumen en redes?
Se me ocurrió a mí juntarnos y somos muchos. Así que en la sala ponemos mesas en forma de U para que estemos todos y traigo mariachi y sonido. Me cantan mis nietos, canto yo, canta mi esposa, Cuquita, y yo me siento muy contento porque son reuniones que de verdad disfruto mucho. Porque yo casi nunca voy a Guadalajara, pues no soporto el tráfico, más bien vienen mis hijos y mis nietos, por lo menos una vez a la semana. Alex, mi nieto, no sale de aquí del rancho y Alejandro mi hijo viene muy de vez en cuando, aunque sus visitas me alegran mucho el corazón.
“Me acuerdo de que cuando empecé en esta carrera mi papá me dijo que si me iba a dedicar a esto, lo hiciera por amor al arte y que lo hiciera bien. El dormir ha sido parte fundamental de su enseñanza para estar bien en un escenario, y para cuidar la garganta”, Alejandro Fernández
¿Cómo fue la celebración de los 80?
La hice con un disco que le puse A mis 80 porque yo he visto cantantes jóvenes, que a los 40 o a los 50 años ya la voz no les funciona. No es crítica, simplemente es consejo para todos aquellos artistas, porque en esta carrera tienes que vivir para cantar y no cantar para vivir. Siempre hay que cuidar mucho la voz.
Don Vicente, a sus 80 años, ¿qué le falta por hacer?
Más hijos, pero ya no se puede (risas). Seguir leyendo: Vicente Fernández, un mes en terapia intensiva