Gerard Piqué, el exfutbolista del Barcelona y expareja de la cantante colombiana Shakira, se encuentra en medio de una nueva disputa por la custodia de sus hijos, Milan y Sasha, tras su separación a finales de 2022.
Al parecer Piqué, propietario de la Kings League, solicitó un cambio significativo en el acuerdo de custodia que firmaron después de su ruptura matrimonial. Esta petición se centra en disfrutar de más tiempo con sus hijos durante los períodos de vacaciones.
La nueva estrategia legal de Piqué vs Shakira
Según el periodista Jordi Martín, el acuerdo de custodia, alcanzado en un juzgado de Barcelona, no fue ratificado en una corte de Miami, donde Shakira y sus hijos residen desde abril. Este vacío jurídico es el que Piqué busca aprovechar para modificar el acuerdo de custodia.
Además, Piqué tiene la intención de poner a la venta la mansión que compartía con Shakira en Cataluña. Esta propiedad, situada en el exclusivo barrio de Esplugas de Llobregat y valorada en aproximadamente 16 millones de dólares, cuenta con numerosas comodidades y está ubicada junto a la casa de los padres del exfutbolista catalán.
Piqué está presionando a Shakira para que la modificación de la custodia se formalice lo más pronto posible. Según el periodista Martín, el exfutbolista podría tener pruebas que complicarían el caso de la colombiana con la Hacienda española, relacionado con un fraude fiscal de más de 14 millones de dólares.
Shakira ya reconoció este fraude y acordó pagar una multa y una fianza para evitar una pena de cárcel.
El caso fiscal de Shakira
Shakira fue acusada de cometer seis delitos contra la Agencia Estatal Tributaria de España. Para evitar pagar impuestos en España, se alega que utilizó un entramado de 15 sociedades en diversas jurisdicciones.
Antes de iniciar el proceso penal, Shakira devolvió 17.2 millones de euros, un movimiento que su equipo legal argumentó como prueba de que no existía ninguna deuda con Hacienda.
La disputa entre Gerard Piqué y Shakira por la custodia de sus hijos entra en una nueva fase en esta controvertida relación.
Con Piqué en busca de aprovechar un vacío legal para modificar el acuerdo existente, la situación se complica con la presión adicional relacionada con el caso fiscal de Shakira y la venta de su propiedad en común.