La actriz Heather Locklear fue trasladada el pasado domingo a un hospital cercano a su casa de California para someterse a una evaluación psiquiátrica después de que uno de sus familiares alertara a las autoridades de su comportamiento supuestamente suicida.
La identidad de la persona encargada de llamar a la policía no ha trascendido, pero según la información a la que ha tenido acceso el portal TMZ sus declaraciones acerca de la actitud errática de la que estaba haciendo gala la antigua intérprete de ‘Melrose Place’ resultaron suficiente para que varios agentes del departamento del sheriff y del departamento de bomberos se presentaran en su vivienda.
Aparentemente, en las horas previas Heather había amenazado en varias veces con lesionarse y había intentado localizar el arma de fuego que posee.
Se cree que la intervención de las fuerzas del orden respondía únicamente a la necesidad de garantizar la seguridad de la estrella televisiva y no a la sospecha de que pudiera haberse cometido alguna infracción de la justicia.
Problemas con la ley
Sin embargo, el pasado mes de febrero la actriz sí fue detenida en su hogar tras golpear en varias ocasiones a los policías que se personaron en su propiedad alertados por la fuerte discusión que estaba manteniendo en ese momento con su novio, Chris Heisser, a quien también había agredido.
Los cargos por violencia doméstica que se presentaron contra ella fueron retirados por iniciativa de su compañero sentimental, pero la artista tuvo que enfrentarse a la imputación de cuatro delitos ligados a la agresión perpetrada contra los agentes que trataron de reducirla y detenerla, así como otro de resistencia a la autoridad, de los que el pasado abril se declaró no culpable.
Tras ese incidente, Heather ingresó en una clínica de rehabilitación para tratar de superar sus adicciones y los súbitos cambios de humor que irían aparejados a ellas.