Recientemente el actor Juan Pablo Medina habló en un podcast mexicano sobre cómo es que tomó la difícil decisión de que le amputaran la pierna derecha, el rol que tuvo su familia en ese momento tan complicado y las enseñanzas que ha tenido durante este año y medio de transformación tanto física como personal.
Como bien es sabido, en julio de 2021 la vida de este actor mexicano de 45 años dio un giro de 360º cuando al ignorar las señales de alerta que su cuerpo le gritaba, le tuvieron que amputar su pierna derecha.
El actor relató que se encontraba laborando en un importante proyecto cuando de un momento a otro su cuerpo se puso mal y llegó hasta una sala de emergencias, y despertó tres días más tarde con noticias que nunca imaginó escuchar. “Lo tengo un poco borroso, pero bajaron a hacerme estudios y después de eso blackout, tengo una imagen donde uno de los médicos me decía:voy a hacer todo lo posible por salvar tu pierna”, dijo.
El actor de “La Casa de las Flores” se cuestiona cómo fue posible que no notara que algo andaba mal con su cuerpo, hasta que colapsó de esta manera. Señaló que al enfocarse tanto en su trabajo y ponerlo como una prioridad por encima de cualquier otra cosa, no se permitió escucharse y tuvo graves consecuencias.
En cuanto a su estado de salud, los doctores le dijieron que no solo era la pierna donde tenía coágulos, sino que tenía infestado el intestino (en la mesentérica), que es la arteria que pasa por el intestino, y eso era lo más grave, porque era probable que no pudiera salir de ese problema, además de todo lo anterior, se dieron cuenta que estaba infartado.
Para solucionar esto le practicaron una ileostomía, donde sacan el intestino y te ponen una bolsa y para que te la quiten tienen que pasar tres meses para que por dentro sanes y se pueda conectar. “Fueron tres meses después de salir del hospital con la bolsa, aprendiéndome a levantar, no podía ni levantarme de la cama, fue poco a poco”, relató.
Pero su pierna no corrió con la misma suerte, ya que aunque uno de sus médicos le había prometido que haría lo necesario para salvar su pierna, su vida estaba comprometida y hacer la amputación era la única manera para liberarlo del dolor y mantenerlo a salvo, así que con el amor de su familia y sus seres queridos, decidió hacer lo mejor para su salud, aunque extrañara su terapia de toda la vida para liberarse del estrés que era jugar fútbol los domingos, pues ya no podría hacerlo más.
Tras perder su pierna vinieron nuevos retos para Juan Pablo, así como terapias, curaciones, adaptación a su nueva condición, y el aprendizaje de abrir su mente a nuevas realidades, pues aunque durante todo el proceso tuvo acompañamiento psicológico y psiquiátrico, el actor no se había permitido atravesar por el proceso del duelo que correspondía.
“Realmente hasta hace poco me está cayendo el veinte del duelo, de la aceptación y es un proceso muy lindo, la verdad, o sea ya entenderte porque pues no pasa nada, o sea al final estoy aquí y mis posibilidades se abrieron de una manera increíble, mi mente estaba muy cerrada antes”. Poco a poco fue descubriendo que su carrera no había acabado, sino al contrario, se le abrieron muchas otras puertas que no había contemplado, el punto es echarle ganas a la vida, pues el actor aún tiene muchas ganas de vivir y de seguir haciendo cosas por él, y por sus sueños.