Se inició una investigación sobre el videoclip de la nueva canción de Katy Perry por daños ambientales debido a la falta de permisos para filmar en la región.
Las autoridades de las Islas Baleares investigan el rodaje del video de la canción de la cantante, donde Katy Perry aparece en la playa con su pareja, bailando y saltando en las islas. El video está por alcanzar los 3 millones de reproducciones en Youtube.
Las imágenes han generado revuelo ya que las autoridades aseguran que la productora no solicitó la autorización del Ministerio Regional para llevar a cabo la filmación. A pesar de las acusaciones, el comunicado del ministerio aclara que las acciones de Perry no constituyen un “delito contra el medio ambiente”, sino una infracción.
En el artículo 65 del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN), la filmación de reportajes que impliquen la toma de imágenes con cualquier medio y formato con finalidad publicitaria o comercial, requiere la autorización de la Conselleria.
Por su parte, Capitol Records, el sello discográfico de Katy Perry respondió que sí tenían permiso de grabar en las islas, y aseguraron que la empresa local de producción de videos les garantizó que todos los permisos necesarios estaban asegurados.
“Desde entonces hemos descubierto que uno de los permisos estaba en proceso, aunque recibimos autorización verbal para proceder”, indicó el portavoz.
El equipo de producción había pedido permiso el 22 de julio y recibieron la aprobación verbal el 26 de julio para filmar el 27 en el Parque natural de Ses Salines.
De manera que el equipo de Katy Perry puntualizó que cumplió con todas las regulaciones asociadas con la filmación en esta área”.