En la década de los 90, Kevin Costner fue uno de los galanes de Hollywood más solicitados. Cintas como “JFK”, “Danza Con Lobos”, “Robin Hood: El Príncipe de los Ladrones” y “El Guardaespaldas”, entre otras, lo consolidaron en el cine.
El filme “El Guardaespaldas”, de 1992, y que protagonizó Whitney Houston, fue un éxito en la carrera de Costner por lo que una segunda parte estaba en la mente del también productor.
Para este proyecto, el actor, de 69 años, pensó en incluir a la princesa Diana como su protagonista por lo que se echó andar una serie de eventos para poder concretar la película.
“Iba a hacer una segunda parte de ‘El Guardaespaldas’. Realmente estaba avanzando muy discretamente porque así es como opero. Mantengo las cosas en privado. Por eso, cuando finalmente surgió que la princesa Diana podría hacerlo, hablamos”, dijo Kevin Costner a la revista People.
Fue la duquesa de York, Sarah Ferguson, quien ayudó al actor para contactar a Lady Di.
“Sarah, duquesa de York, fue quien organizó el encuentro (con la princesa Diana). Sarah fue muy genial porque pudo haber dicho: ´-¡Bueno, yo también soy una princesa!, ¿qué hay de mí?”, contó.
Sin embargo, tras la muerte en 1997 de Diana, Costner decidió cancelar el proyecto.
La curiosa revelación del príncipe William
Pasaron los años y Kevin Costner recibió una invitación para una reunión privada con el príncipe William, hijo de Lady Di y el rey Carlos III. En esta charla, el heredero británico le hizo una confesión al actor sobre que era el amor platónico de su mamá.
“Sabes, a mi madre le gustabas”, recordó el actor que le dijo el príncipe.
Costner le respondió al esposo de Kate Middleton: “Lo sé", a lo que siguió una plática de poco más de media hora. Este encuentro lo define el protagonista de “Danza Con Lobos” como muy dulce.
“Simplemente charlamos y luego nos separamos. Nunca nos convertimos en amigos por correspondencia ni nada parecido. Pero guardé un recuerdo muy grato de quién era él, de cómo me abordó y de lo que hablamos”.
