Hace un par de días, Ludwika Paleta compartió una serie de fotografías de su último viaje, en el que se dedicó a disfrutar y se olvidó de las apariencias frente a la cámara mostrándose al natural. Lo que sin duda alguna nunca esperó, fue que el hecho de dejarse ver sin maquillaje ni filtros le valdría una oleada de comentarios negativos sobre su imagen.
Estos señalamientos no pasaron desapercibidos para la actriz, quien esta vez no quiso quedarse callada y reaccionó firmemente a la forma en que se ha hablado sobre ella por razones que nada tienen que ver con su carrera artística.
Ludwika Paleta enfrentó a quienes la atacaron por cómo se ve sin maquillaje
Uno de los últimos posteos de Ludwika Paleta se inundó de malos comentarios acerca de su apariencia física, muchos de ellos haciendo referencia a aspectos alusivos a su edad. Si bien la actriz no suele involucrarse en estas cuestiones, en esta ocasión optó por hacerle frente y dejó ver lo incorrecto que es hablar de alguien tan a la ligera.
“Esta es solo una probadita de los comentarios que recibo todos los días. No solo yo, muchas personas en todo el mundo, sobre todo mujeres”, escribió Ludwika en Instagram, donde dijo que aunque ella ha aprendido a no tomarse a pecho los ataques, no quiere decir que no le incomodan.
Asimismo, Paleta añadió que este tipo de actitudes reflejan parte de la problemática que existe actualmente alrededor de las mujeres, a quienes constantemente se les exige siempre lucir impecables para poder seguir siendo consideradas merecedoras de respeto.
“¿Ustedes tienen hijas, sobrinas, hermanas? ¿Se han puesto a pensar por qué la gente no se acepta físicamente? ¿Por qué las más jóvenes buscan constantemente cambiar su apariencia para alcanzar una belleza imposible? Estos comentarios no me lastiman a mí. Lastiman a quien los escribe y lastiman a quien los lee sin tener claro quiénes son todavía”, expresó Ludwika.
El consejo que Ludwika le dio a sus “retractores”
Finalmente, invitó a quienes la siguen a medir el impacto de sus palabras y a dejar de lado esa mala costumbre de darle valor a las personas por cómo se ven, especialmente a las figuras públicas.
“Aprendamos a ser más empáticos. Si no tienes nada bueno que decir, es mejor no decir nada. Yo sí tengo una hija y tengo sobrinas. También tengo dos hijos hombres. Y a todos los amo profundamente sin importar cómo se ven”, finalizó Ludwika, que en ocasiones anteriores ha compartido que prefiere resguardar la identidad de sus hijos menores, posiblemente para protegerlos de ataques.