Por Bang Showbiz @CARASmexico
La aparición de Keanu Reeves a principios de noviembre en un evento de Los Ángeles de la mano de una misteriosa mujer dejó un tanto confundidas a las redes sociales, que en un primer momento identificaron a su acompañante como la veterana actriz Helen Mirren.
Finalmente se desveló que se trataba de una de las colaboradoras habituales de la editorial X Artists del actor llamada Alexandra Grant, que resulta ser además su actual pareja sentimental, pero a esas alturas ya se le había atribuido el título de la ‘gemela perdida’ de la intérprete británica.
En realidad, el único rasgo en común que comparten ambas mujeres es su pelo, que lucen en un favorecedor tono entre rubio platino y gris y con un flequillo ladeado, aunque en el caso de Alexandra parece que ella tiene una melena algo más larga que para su ‘debut oficial’ con su famoso novio optó por recogerse en un moño con trenzas.
Este semana la artista ha desvelado los motivos por los que hace tiempo renunció a disimular sus famosas canas para presumir de su melena ‘al natural’ haciéndose eco a través de sus redes sociales de un estudio llevado a cabo entre 50.000 mujeres que conecta el cáncer de pecho con el uso frecuente de tintes y productos químicos de alisado.
“Wow... la noticia de hoy... Las estadísticas son alarmantes, en especial para las mujeres de color. A mí empezaron a salirme canas de manera prematura cuando todavía era una veinteañera... y a lo largo de todo ese proceso llevé el pelo de todos los colores posibles hasta que ya no pude seguir tolerando la toxicidad de los tintes. Cuando cumplí los 30 decidí que dejaría que mi pelo se volviera ‘rubio’. Me encanta que cada mujer pueda elegir qué aspecto quiere proyectar a cada edad y las apoyo de corazón. Pero/y si las mujeres están falleciendo por culpa de ciertos estándares de belleza... entonces deberíamos de empezar a cuestionar esos mismos estándares. Mi amor a todas las mujeres”, ha escrito la artista en su cuenta de Instagram utilizando en todo momento el término inglés “womxn” que se ha venido empleando en los últimos años como parte del lenguaje inclusivo para referirse a todos los miembros del colectivo femenino.