¿Qué mujer no desearía tener el cuerpazo que tiene Jennifer Lopez a los 50 años? Quien diga que no, miente.
Y es que las fotos de Jennifer Lopez en bikini se han convertido en la última obsesión de las redes sociales: todo el mundo quiere saber cómo consigue mantener un cuerpo de infarto a sus 50 años y la realidad es que no existe una respuesta sencilla para esa pregunta.
La diva del Bronx cuenta con una genética privilegiada, según ha reconocido ella misma en varias ocasiones, pero también se esfuerza al máximo para mantenerse en forma y uno de sus grandes secretos para cuidar su alimentación pasa por tener en nómina un chef personal que sabe muy bien lo que se espera de él.
Antes de los grandes eventos como su actuación en la Super Bowl del pasado mes de febrero, por ejemplo, la artista sigue una dieta muy estricta para reducir el consumo de carbohidratos y azúcares a ciertas horas y días.
Durante esas semanas, su chef, Kelvin Fernandez, le prepara cada plato para que ella no tenga que servirse una vez sentada a la mesa y caiga en la tentación de coger algo que no debe.
Esta norma se implantó después de que la artista comiera ‘por accidente’ algo que no estaba contemplado en su régimen.
“Si meto la pata, ella me lo echa en cara, y está en su derecho de hacerlo”, ha señalado el cocinero en una entrevista a Us Weekly. “En una ocasión quise hacer algo bonito por ella, porque se lo merece y trabaja muy duro, y organicé una cena familiar. Al día siguiente se me acercó y me dijo: ‘Kevin, anoche me serviste arroz’. Le contesté: ‘No, no, no, no. Había ensalada, había pollo. Tú fuiste la que se lanzó por el arroz’”.
En su vida normal, Jennifer nunca come salmón porque no le gusta su textura y tampoco es una gran aficionada a la fruta, que trata de sustituir por zumos o batidos verdes, aunque siempre se asegura que su despensa esté llena con la comida favorita de cada miembro de su amplia familia.