La relación entre madre e hija siempre ha sido extraordinaria pero hoy lo está más que nunca. Ahora, Paulina Rubio y Susana Dosamantes se encuentran luchando contra el delicado diagnóstico que le fue dado a la actriz.
Por Erika Roa T.
Fotos Getty Images y Archivo CARAS
Los dolores de parto no cesaban, ella lo sabía, su bebé nacería en ese momento. El doctor que atendía a Susana Dosamantes estaba seguro, que por ser primeriza, todavía le faltaban muchas horas de labor de parto, así que por teléfono le dijo que iría hasta más tarde al hospital para atenderla, pero nunca llegó.
Susana, que tenía solo 19 años, dio a luz en uno de los pasillos del Hospital ABC de Observatorio auxiliada por un pasante que según ella parecía su sobrino. Sin embargo, la conmoción no quedó ahí, cuando le llevaron a su hija, no podía creer lo que veía, era una bebé rubia de ojos claros. Susana pidió que revisaran si de verdad esa niña era suya o se habían equivocado y era de una pareja inglesa. Las enfermeras le mostraron la pulsera con los datos de la actriz y de su primer esposo, el abogado español Enrique Rubio González.
Sí, esa chiquita era suya. Desde entonces, entre Susana y su hija, la cantante Paulina Rubio, ha existido una relación de incondicional y profundo amor que las ha llevado a disfrutar intensamente días de gloria y tormentas. No obstante, hoy viven un gran temporal, pero madre e hija ‒tomadas de la mano‒ confían en que todo saldrá bien.
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A comienzos de abril, la familia Rubio Dosamantes dio a conocer que Susana padecía cáncer de páncreas, el cual está tratándose en el Mount Sinaí Medical Center en la ciudad de Miami. Ahí está siendo atendida por un grupo de especialistas de ese centro, así como sus médicos en México.
La familia y amigos más cercanos confían en que con amor y paciencia superará esta enfermedad. Todos tienen fe de que saldrá adelante como la guerrera que siempre ha sido. La familia entera se encuentra centrada en el cuidado de Dosamantes, quien también está tranquila y positiva. Ella no ha perdido el sentido del humor, además de estar muy optimista al iniciar su tratamiento.
LAS RECIENTES IMÁGENES Y UN POST
El 24 de febrero pasado fue la más reciente ocasión en que se pudo ver a la actriz cuando acompañó a Paulina en la 34 entrega de los Premios lo Nuestro. Susana lucía como siempre guapísima, con un conjunto de pantalón blanco y túnica de gasa bordada con pedrería color plata. También las acompañaban los dos hijos de la cantante, Nicolás y Eros. Susana no podía disimular lo orgullosa que estaba por su hija.
El 11 de marzo la actriz subió un mensaje a su cuenta de Instagram con una imagen en donde se podía leer: “Que pase lo que tenga que pasar”. De este modo, hoy madre e hija tomadas de la mano enfrentan una nueva batalla de vida, y como ha sido desde el comienzo de su historia, están fuertes y unidas para luchar contra el cáncer. Descubre el artículo en la edición impresa CARAS MAYO