Sonia Infante fue famosa por su belleza y sex appeal… Durante los años 70 y 80 fue considerada un icono sexual de las pantallas mexicanas tanto en cine como en televisión.
La familia de Sonia Infante
Llevar el apellido Infante era algo muy importante en la escena del showbiz mexicano. Sonia era hija de Ángel Infante, hermano mayor del ídolo de México, Pedro Infante, quien llegó a vivir con su hermano a la Ciudad de México cuando este trabajaba en la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (después Transportes). Cuando Pedro ya era un actor medianamente conocido, Ángel participaba en sus películas como doble o ensamble. En el medio artístico conoció a su primera mujer, la actriz Esther Luquín, con quien tuvo cinco hijos, entre ellos Toño Infante, actor y cantante; con su segunda esposa, Consuelo López, procreó a cuatro vástagos más. La más pequeña: Sonia, nacida en 1944 en Morelia.
Sororidad actoral
La sobresaliente belleza de Sonia la llevó a debutar rápidamente como actriz en la cinta Dormitorio para señoritas, en 1960, gracias a su amiga, la manager y productora Angélica Ortiz, mamá de Angélica María. Otra hada madrina para Sonia fue la actriz Evangelina Elizondo, quien la recomendó para aparecer en El Pozo en 1961. Durante los siguientes años, participó en numerosas películas de terror y comedia; pero su gran momento fue cuando Mario Moreno “Cantinflas” la eligió como dama joven para la película Su Excelencia, en 1967, pues en aquellos años, las películas del mimo eran una gran plataforma hacia el estrellato.
Retiro por matrimonio
Sin embargo, ese gran momento se vio truncado por su matrimonio con el productor Gustavo Alatriste, quien había estado casado con la diva del cine, Silvia Pinal y cuya relación terminó porque la actriz quiso seguir trabajando. Al contrario de Pinal, Sonia Infante se dedicó al hogar y a su familia durante los 18 años que estuvieron juntos y tuvieron dos hijos, Pedro y Ángela. “Yo era una niña de mi casa, una jovencita bien educada que siempre buscó el amor y formar una familia, ese fue mi sueño, yo no quería ser una sex symbol o algo parecido”, declaró Sonia en una entrevista a TvyNovelas en 1990, a propósito de su nueva telenovela Un rostro en mi pasado.
Nace una feminista
Pero el tiempo la hizo cambiar de parecer… En 1982 regresó al cine tras su divorcio, convertida en una mujer plena y segura de sus convicciones; renovada y más sexy que nunca, cambió su castaña cabellera por un rojo incendiario y no dudó en seguir apareciendo en bikini, cuando ya se acercaba a los 40. En una fiesta conoció al galán Andrés García y vivieron un romance súper intenso; eran tan populares que aparecieron juntos en la cinta Toña Machetes, que resultó el gran come back de la diva a la actuación, en 1985. La relación terminó en boda, pero llegó a su fin ese mismo año. La anécdota detrás del divorcio, es que los papeles se perdieron en los tribunales durante el sismo de 1985 y tuvieron que realizar el trámite de nueva cuenta. Todos los avatares de la relación se ventilaron en la prensa, lo que le dio a Sonia fama de “claridosa” y escandalosa.
Las telenovelas
Si bien Sonia había debutado en 1963 en Mi alma por un amor protagonizada por Angélica María (salía de hada mágica), su fuerte en los melodramas vino en los 80: productor Ernesto Alonso “El señor telenovela”, quien era su gran amigo, le produjo El precio de la fama (1987) al lado de Sergio Goyri, y que trataba la vida de una actriz madura que se arrepiente de haber llegado al éxito usando a los hombres. Su siguiente éxito fue Un rostro en mi pasado (1990) con Joaquín Cordero, en la que interpretaba a una empresaria literaria que fue acusada de un crimen que no cometió. En 1995 se cambió a la televisora del Ajusco para enrolarse en la telenovela Con toda el alma, reencontrándose con su viejo amor Andrés García.
Una sexy mujer madura
A lo largo de su carrera, Sonia fue muy consciente de su belleza y poderosa personalidad, pero en su etapa de mujer madura de 40 años, durante sus mejores momentos televisivos, hizo hincapié en pensamientos feministas que trataban sobre la libertad sexual de la mujer o la toma de decisiones individuales; eso la volvió blanco de críticas, además de su carácter temperamental.
Sonia Infante se retiró de la actuación en 2007, con la telenovela Sin miedo a la muerte en Televisa. Desde marzo de este año se encontraba enferma, según dijo su hermano Toño Infante, al reportar su muerte esta mañana, a los 75 años, en la Ciudad de México.
