La serie surcoreana “Juego del Calamar” ha conmocionado al mundo con su impactante trama sobre cientos de jugadores desesperados que se someten a desafíos infantiles convertidos en pruebas mortales. Sin embargo, uno de los aspectos más perturbadores de la historia se revela en el episodio 7 de la primera temporada, cuando entran en escena los siniestros VIP, personajes adinerados que observan los juegos desde la opulencia y el anonimato que otorgan sus máscaras doradas.
¿Quiénes son los VIP y qué rol cumplen en el “Juego del Calamar”?
Los VIP son un grupo de individuos sumamente ricos que llegan a la misteriosa isla para presenciar, en carne propia, los juegos finales en los que participan los concursantes.
Según la trama, fueron clientes de Oh Il-nam, el anciano creador de este macabro espectáculo. Aburridos de su cómoda vida, se agruparon para financiar los “Juegos del Calamar” como fuente de entretenimiento, además de apostar enormes sumas de dinero sobre los participantes que consideran más fuertes o astutos.
La presencia de estos VIP revela que, detrás del siniestro concurso, no solo hay dinero, también se hace presente una obsesión retorcida por el morbo y la violencia, ante una vida con tal opulencia que perdió todo sentido del disfrute.
¿Por qué los VIP del “Juego del Calamar” son tan siniestros?
Aunque el núcleo de la serie muestra la desesperación de los jugadores que arriesgan la vida para conseguir una fortuna, la aparición de los VIP añade una capa de crueldad mucho mayor. Ocultos tras máscaras de animales lujosas, estos personajes se comportan como cazadores que observan a sus presas.
Sus acciones, lenguaje vulgar y desdén por la vida humana dejan en claro que ven a los concursantes como simples piezas de un juego. La serie deja entrever que algunos VIP se complacen en fantasías sexuales e incluso podrían llegar a intentar abusar de otros siervos, como el caso del VIP con máscara de pantera y el agente encubierto Hwang Jun-ho.
¿Qué representan las máscaras de animales que usan los VIP?
Las máscaras doradas que portan los VIP, en forma de diferentes animales, no son solo un adorno extravagante. Simbolizan su deshumanización y su desapego de la realidad de los juegos. Al ocultar sus rostros, se distancian de las consecuencias de sus apuestas para ver a los participantes como simples peones en un macabro espectáculo. Esta despersonalización acentúa su crueldad y su falta de empatía.
¿Cómo se crearon los VIP y cuál es su historia dentro de la serie?
La concepción de los VIP está ligada directamente a Oh Il-nam, la figura en la sombra que diseñó esta competencia. Desde el principio, Il-nam y su firma financiera encontraron en estos millonarios el respaldo perfecto para montar un espectáculo de proporciones brutales.
La historia que se cuenta en la serie es que los VIP han estado financiando los “Juegos del Calamar” durante 33 ediciones, acuden en ocasiones puntuales a la isla para presenciar rondas cruciales, como la prueba del puente de cristal y la final entre Seong Gi-hun (Jugador 456) y Cho Sang-woo (Jugador 218). La ausencia de Il-nam en el episodio 7 se debe a su participación secreta como concursante, lo que obliga al misterioso Líder a recibir a los VIP.
¿Quiénes interpretan a los VIP y cómo se inspiró su caracterización?
Aunque en la serie se mantienen en el anonimato, cada VIP está asociado a un animal dorado. Estos son los intérpretes principales identificados en la primera temporada:
- El VIP con máscara de león (VIP 1) es interpretado por John D. Michaels. Este personaje se muestra particularmente arrogante, al burlarse de sus compañeros que apuestan por los concursantes equivocados.
- El VIP con máscara de búfalo (VIP 2), encarnado por Daniel C. Kennedy, comparte con el primero una actitud sarcástica.
- El VIP con máscara de ciervo (VIP 3), a quien da vida David Lee, interviene menos en pantalla, pero representa uno de los inversionistas más enigmáticos.
- El VIP con máscara de pantera (VIP 4), interpretado por Geoffrey Giuliano, es el más depravado del grupo. Al notar el disfraz de camarero de Hwang Jun-ho, lo intenta atraer a sus juegos sexuales, sin saber que se trataba de un policía encubierto.
- El VIP con máscara de oso (VIP 5), el VIP con máscara de águila (VIP 6) y un VIP con máscara de búho (VIP 7) aparecen brevemente, para completar esta élite corrupta que observa y apuesta.
En entrevistas, varios de estos actores explicaron que el director Hwang Dong-hyuk buscaba transmitir la esencia de “hombres occidentales ricos y depravados”, al acentuar la idea de que los VIP provienen de diferentes lugares del mundo, pero comparten un mismo placer por la crueldad y el lujo desenfrenado. La actuación incluyó directrices para que hablaran a gritos y mostraran comportamientos exagerados que pudieran reflejar su poderosa influencia y su falta de empatía hacia el sufrimiento humano.
¿Cómo reaccionan los VIP ante el juego final?
Tras el angustiante juego del puente de cristal, los VIP son testigos de la última prueba: “El juego del calamar”, que enfrenta a Gi-hun y Sang-woo por el premio millonario. Su principal reacción es de decepción cuando Seong Gi-hun se plantea terminar el juego en lugar de asesinar a su amigo de la infancia. Sin embargo, el clímax sucede cuando Sang-woo se quita la vida para permitir que Gi-hun gane. El desenlace deja a los VIP en un desconcierto momentáneo, aunque la serie no aclara si se marchan enfadados o satisfechos por el espectáculo que han presenciado.
¿Qué implica su rol para la trama futura del “Juego del Calamar”?
La presencia de los VIP plantea la cuestión de si habrá represalias cuando se descubra la intervención de Hwang Jun-ho en la isla, o si la organización buscará otros medios para llevar a cabo futuras ediciones del juego. También surge la duda de qué tan alto llega la red de complicidades detrás de estos personajes adinerados y hasta qué punto su influencia puede desdibujar la línea entre la legalidad y la impunidad. Se especula que en una próxima temporada podría ahondarse en sus vidas personales y su relación con otros peces gordos que mantienen este siniestro torneo activo.
La historia de los VIP en “Juego del Calamar” refleja una de las críticas más inquietantes de la serie: el extremo al que pueden llegar quienes lo tienen todo y necesitan más que diversión para alimentar su fastidio por la monotonía. Son, en definitiva, la viva imagen de la depravación de un sistema que convierte la vida humana en fichas de apuesta, al hacer de su participación en la trama un aspecto fundamental para entender la atmósfera perturbadora que rodea este fenómeno de Netflix.