Anne JKN adquirió la Organización Miss Universo el año pasado, un cambio inesperado para muchos. Su meta es transformar el concurso en algo más que una simple imagen; busca hacerlo inclusivo. Quiere que Miss Universo sea un espacio acogedor para mujeres y personas LGBTQ+. A pesar de ser una de las personas trans más ricas del mundo, su origen fue humilde: creció en Bangkok y enfrentó acoso en su juventud. Sin embargo, encontró su pasión por la televisión y ha logrado grandes avances, convirtiendo la tienda de alquiler de videos de sus padres en un imperio mediático. Además, lidera programas televisivos y fundó una organización de apoyo a personas transgénero. Su historia es de superación y determinación. Ahora, nos cuenta cómo está transformando Miss Universo, los cambios que ha implementado desde su dirección y cómo ha logrado convertir el famoso concurso de belleza en un espacio lleno de diversidad, inclusión y empoderamiento.
¿Cuáles son los cambios significativos en las reglas de Miss Universo para la 72ª edición?
Inclusividad, para que todas las mujeres se sientan parte de, incluyendo a mujeres trans, mujeres casadas, mujeres de tallas grandes, mamás entre otras. La inclusividad es muy importante, valorar a todas sin importar quiénes sean o de dónde vengan, y darles una voz.
¿Cuál fue tu principal motivación para introducir la diversidad en el certamen de Miss Universo este año?
Obtuvimos retroalimentación de muchas personas, tomando en cuenta a diferentes tipos de mujeres, valorando su diversidad y fomentando la sana convivencia. Miss Universo representa precisamente eso: ser valoradas como seres humanos, ofreciéndoles un escenario y una plataforma que forman parte del empoderamiento femenino. Nutrimos a las mujeres y nos encanta verlas convertirse en la mejor versión de sí mismas, convirtiéndose en íconos globales y nacionales, siendo lideres de transformación.
¿Cómo ha recibido el público y seguidores de Miss Universo los cambios introducidos en el certamen este año?
A la mayoría les encantó. Mantuvimos una vibra positiva todo el tiempo y la gente nos agradeció constantemente por permitir las diferencias en el escenario, sin importar quién eres, tu tamaño o estatus, si estás casada o soltera, madre o no. Abrirnos a la nueva generación fue muy bien recibido, siguiendo la verdad, pasión y camino de cada una de las mujeres en Miss Universo.
¿Cómo se ha adaptado la organización para promover la inclusión y la diversidad en la competición?
Tuvimos que formar un equipo sólido y fuerte con socios y personal a tiempo completo, trabajando en colaboración e implementando iniciativas que promovieran los valores de Miss Universo. Continuamos con una misión y visión que permitían a todas las mujeres representar a sus países y hablar sobre su verdadera vocación, ofreciendo el mejor enfoque al mundo y centrándonos en el cambio y la transformación.
¿Cuál es tu principal expectativa para el certamen Miss Universo de este año en términos de impacto social y cultural?
Necesitamos tener un grupo de reinas comprometidas con obras de caridad, cada país preparándose y mostrando progreso continuo, alentando al mundo a asumir misiones a largo plazo para ayudar al mundo.
¿Cuáles son tus planes a futuro para seguir promoviendo la inclusión y la diversidad en Miss Universo en los próximos años?
Nuestra misión es transformar los certámenes en una plataforma de empoderamiento. Simplemente tener un concurso de belleza ya no es suficiente; debe ir acompañado de las voces de las mujeres empoderándose. Como organización, proporcionamos la plataforma para lograrlo, esforzándonos por mejorar cada día, siendo más relevantes e inclusivos.