Shakira y Gerard Piqué, al tener que enfrentar una situación alarmante debido a un acosador obsesionado con la cantante, tomaron medidas drásticas para garantizar la seguridad de sus hijos.
La cantante colombiana, al llegar a Miami, se encontró con un acosador completamente obsesionado con ella.
Durante su juicio se pudo notar la gravedad de su obsesión, al asegurarle al juez que él era el esposo de Shakira. Ante tal situación el juez impuso un mayor castigo; sin embargo, este individuo, ahora detenido, podría salir fácilmente de la cárcel al pagar sólo una fracción de su fianza de más de 160 mil dólares. Ante esta posibilidad, Shakira buscó medidas de protección adicionales.
Las medidas que tomaron Shakira y Piqué
Según Álex Rodríguez, colaborador del programa “Vamos a ver”, Shakira solicitó vigilancia constante en su residencia en Miami. “Dos patrullas de Policía están apostadas en la puerta de su casa las 24 horas del día”, informó Rodríguez.
Esta decisión se tomó a pesar de que la familia del acosador no planea ayudarle a pagar la fianza, conociendo su estado mental.
Gerard Piqué, preocupado por la seguridad de sus hijos, acordó con Shakira reforzar las medidas de seguridad. Ambos están considerando vender la casa en Miami y contratar más guardaespaldas para aumentar la protección de su familia.
La preocupación principal de Shakira y Piqué es evitar que se repitan incidentes similares en el futuro. Las medidas adoptadas buscan incrementar la seguridad y mantener el bienestar de sus hijos. La posibilidad de que el acosador salga bajo fianza ha exacerbado la necesidad de que estas medidas preventivas sean aplicadas pronto.
En una situación donde la tranquilidad familiar se ve comprometida, la pareja ha optado por actuar de manera proactiva, demostrando su determinación para proteger a sus hijos de cualquier peligro potencial.