Con más de 20 años de casados, Thalía y Tommy Motola se han consolidado como uno de los matrimonios más estables de la industria musical. Durante este tiempo juntos, la pareja ha conseguido equilibrar su arrasadora fama con su vida privada, evitando así complicaciones o conflictos.
Esto sería resultado de la excelente comunicación que llevan y la conexión que tienen, misma que se hizo presente desde su primera cita, cuando gracias a una peculiar maniobra de Thalía, Motola cayó rendido ante la belleza y personalidad de la cantante.
Así fue la primera cita de Thalía y Tommy Motola
Hace algunos días, Thalía asistió como invitada al talk show de Kelly Clarkson, ocasión en la que tuvo oportunidad de hablar acerca de diversos aspectos de su carrera profesional y vida laboral.
Uno de los temas que inevitablemente se tocaron durante la entrevista, fue la relación que mantiene con Tommy Motola desde hace 25 años, y junto a quien llegó al altar en una boda repleta de celebridades en el año 2000.
La cantante recordó que el primer encuentro con su ahora esposo y padre de sus dos hijos se dio gracias a Emilio Estefan, pues fue el músico quien la incitó a conocer a uno de sus amigos, sin imaginar que se convertiría en su familia poco después.
Thalía recreó esa memoria y contó que se encontraba en Estados Unidos debido a una filmación que se encontraba realizando, razón por la que pudo convivir con el productor por algunos días.
Este es el truco que usó Thalía para conquistar a Tommy Motola
Thalía detalló que cuando accedió a salir con el amigo del músico, no sabía de quién se trataba, por lo que no asistió a la cita con demasiadas expectativas. Además aseguró que en ese momento no tenía intenciones de “engancharse” con algún hombre, pues estaba enfocada en su carrera.
No obstante, la plática surgió de manera natural, aunque confesó que llegó a ser complicado porque no hablaba bien inglés. Este desconocimiento del idioma dominante en el país donde estaba le dio la respuesta que necesitaba para amenizar la charla y puso en marcha una táctica de seducción que funcionó.
Según la versión de la cantante, su primer instinto para erradicar los silencios que se daban, fue recitar el diálogo de una de las escenas que había grabado para su película en Estados Unidos.
“No tenía idea de qué decir, pero usé mi lenguaje corporal. Entonces pensé en una línea de las que había memorizado y repetí el guión. Eso hizo reír a Tommy, así que me dí cuenta de que estaba funcionando”, recordó Thalía, aludiendo el hecho de que su sentido del humor fue uno de los aspectos sobre su persona que terminaron por cautivar a Tommy Motola.