Tras 22 años juntos, la industria del entretenimiento fue testigo del fin del matrimonio entre Isla Fisher y Sacha Baron Cohen, con ello la pareja se une a una lista de separaciones sorpresivas que han captado la atención del público recientemente.
La pareja, que inició su relación en 2001 y contrajo matrimonio en 2010, utilizó sus redes sociales para anunciar su decisión de divorciarse, y dar fin a un largo “partido de tenis” de dos décadas, como metafóricamente lo describieron.
La mudanza a Australia
Aunque el anuncio tomó por sorpresa a muchos, se revela que el círculo más cercano de amigos estaba al tanto de la situación. Informes indican que una mudanza a Australia, que tenía la intención de estar más cerca de la familia de Fisher, marcó el inicio de tensiones que eventualmente llevarían a la separación.
Esta decisión habría colocado a Baron Cohen en una posición incómoda, ya que se encontraba significativamente alejado de su entorno familiar y social, algo que poco a poco se convirtió en un aspecto difícil de llevar.
El inicio del final
La situación comenzó a tomar forma de separación en 2022 cuando Fisher consultó a Fiona Shackleton en Londres, conocida como la “reina de los divorcios” en Inglaterra, quien ha representado a figuras de la talla del rey Carlos III y Madonna en sus respectivas separaciones.
Shackleton, con su reputación de lograr acuerdos amistosos en procesos de divorcio complicados, aconsejó a Fisher sobre cómo navegar la disolución de su matrimonio con Baron Cohen.
El desafío del acuerdo prenupcial y la fortuna compartida
A pesar de contar con un acuerdo prenupcial, la división de la fortuna entre Fisher y Baron Cohen, estimada en 40 millones de dólares, se presenta como un desafío considerable a resolver . El proceso legal debe abordar tanto la custodia de sus tres hijos como la repartición de bienes adquiridos conjuntamente con la intención de construir una vida familiar.
Según fuentes cercanas, ambos enfrentan dificultades en este aspecto debido a la naturaleza compartida de sus activos y el propósito familiar detrás de sus inversiones.
También te puede interesar: Quién es Vittoria Ceretti, la joven modelo con la que Leonardo DiCaprio podría llegar al altar
También te puede interesar: Así luce actualmente el rancho donde Pedro Infante y Jorge Negrete grabaron Dos tipos de cuidado
También te puede interesar: Un perro que devoraba al sol y otras leyendas del eclipse solar en el México prehispánico
La mudanza a Australia, inicialmente vista como una oportunidad para Fisher de estar más cerca de su familia, terminó por ser un factor crítico en la erosión de su matrimonio con Baron Cohen. La separación de la pareja destaca la complejidad de gestionar la vida familiar y profesional en el ámbito público, así como los retos que enfrentan las parejas al tomar decisiones que pueden impactar profundamente en sus relaciones personales.
Este divorcio, marcado por la gestión de una considerable fortuna compartida, subraya la importancia de los acuerdos prenupciales y la búsqueda de resoluciones amistosas en situaciones de separación. Mientras el proceso legal continúa, la privacidad y el bienestar de los hijos de Fisher y Baron Cohen permanecen como prioridad para ambas partes, quienes han expresado su intención de mantener el respeto y la devoción mutua por el bienestar de su familia.