Por Diana Laura Sánchez
Nace el nuevo destino online de ropa vintage con piezas originales de diseñadores internacionales rescatadas de distintas épocas. Platicamos con su fundador, Alan de la Peña quien nos dio todos los detalles.
Las piezas de este nuevo destino llamado Suite Potato Pie, son de firmas como Balenciaga, Valentino, Yves Saint Laurent, Gucci y Burberry, entre otras las cuales tienen mínimo 20 años de existencia y están en condiciones impecables. La curaduría esta hecha para trascender edad y género dándole una nueva vida a piezas que son difíciles de encontrar. Apasionado por la moda, Alan de la Peña decidió crear Suite Potato Pie en abril del 2020 bajo la idea de realizar una plataforma online con acceso a piezas vintage originales de distintas épocas para mejorar la forma en la que nos relacionamos con la moda al comprar piezas únicas con historia, reutilizando ropa ya existente en el mundo.
“Hemos creado una plataforma donde encuentras piezas de lujo accesible. Nuestro objetivo principal es posicionar la compra de ropa vintage y quitar ese estigma que tiene mucha gente en México que la ropa está sucia, manchada o desgastada, o inclusive que huele mal”, comenta.
Para Alan, este nuevo destino ‘El postre americano sweet potato pie’ representa la tradición del amor fraternal, el respeto y la gratitud en la cocina africana introducida a Estados Unidos. Una suite de hotel alude a un espacio seleccionado con piezas de lujo. Además la entrada a un mundo de lujo accesible que busca la fraternidad, el respeto y la gratitud con el medio ambiente. “Nos inspiramos en crear una plataforma que tuviera una estética muy limpia, fácil de acceder y de comprar. Todas las piezas contienen una ficha técnica con datos duros que incluyen la descripción detallada de cada pieza, medidas exactas y los diferenciadores que les da un valor agregado único a cada producto. Esto garantiza que nuestros clientes se sientan seguros al comprar”, destaca.
El emprender en tiempos de pandemia resultó difícil pero a pesar de la incertidumbre, el proyecto salió a la luz. “Creo que la pandemia fue una catapulta para muchos de nosotros que queríamos emprender y nos vimos con la necesidad de hacerlo para sobrevivir. Todas las piezas que pertenecen a Suite Potato Pie son del extranjero, la imposibilidad de viajar dificultó mucho la búsqueda de enriquecer nuestro portafolio pero al final se logró", platica. Su mayor satisfacción es ver su proyecto hecho realidad. “Ver las etiquetas por primera vez, el packaging terminado, los complementos impresos. La reacción de la gente también fue muy positiva. Muchos nos apoyaron y genuinamente nos dimos cuenta que el proyecto era una idea completa, 360; en realidad si gustaba. Esa fue una pieza clave para seguir adelante con el proyecto, no detenerme y llevarlo a cabo”, finaliza.