El Museo Rodin fue el escenario perfecto para presentar la colección Haute Couture de Dior en París, con faldas línea A y sastrería, la maison hizo referencia al minimalismo y la feminidad de las prendas mediante colores neutros y siluetas clásicas.
Al desfile asistieron celebridades como Rihanna, Natalie Portman, Anya Taylor Joy, Elizabeth Debicki, Beatrice Borromeo y más.
Como un hechizante hilo de Ariadna, la noción de “aura” impregna toda la colección de alta costura Dior primavera-verano 2024 ideada por Maria Grazia Chiuri.
Explorando la belleza plural de los textiles, la directora creativa inició un diálogo cautivador e inventivo con Isabella Ducrot, quien concibió la escenografía del espectáculo titulada “Big Aura": veintitrés siluetas desproporcionadas se disponen sobre una cuadrícula de líneas negras irregulares que recuerdan la urdimbre y la trama.
Un símbolo del aura y la singularidad que impregna cada pieza de alta costura. Sublimados por un refinado efecto muaré, un efecto apreciado por Christian Dior, los conjuntos reinterpretan La Cigale –ideada por Monsieur Dior para el otoño-invierno de 1952–, revisando así los archivos de la Maison para dar vida a looks contemporáneos.
Por turnos, las creaciones forman una elegancia arquitectónica: abrigos con cuellos imponentes, faldas anchas que revelan aberturas exageradas, capas, pantalones y chaquetas. Ciertas prendas de terciopelo magnifican el encanto y se mueven con fluidez, mientras que una suntuosa capa de plumas se asienta sobre un vestido de organza doble bordada. Una maravillosa odisea que expresa el valor aurático, escultórico y metamórfico de la alta costura.