Jacqueline Bracamontes inauguró la conferencia anual de “Mothers Front” 2018 con el tema “Mamá primero” donde hizo un recuento a las mamás presentes, de todo lo que ha vivido con el nacimiento de sus tres hijas Jacky, Carolina y Renata, a quienes procreó junto a su esposo Martín Fuentes.
Durante la charla que fue muy conmovedora, le fue duro recordar la muerte de su hijo Martín que era mellizo de Jacky, mencionando que murió a las 34 semanas de gestación, por lo que la tapatía se preguntaba “¿por qué a mí?, hasta que cambié la pregunta ¿para qué? y es cuando entendí por qué se había ido, porque Martín salvó a Jacky para que estuviera aquí”, dijo conmovida la conductora de televisión.
Al término de su ponencia, platicamos con ella sobre este tema que le costó trabajo superar en 2014 y ahora vive con eso.
“Siempre me pone sensible hablar de mi bebé es algo que no se supera, pero se aprende a vivir con eso”, dijo a JDS luciendo un outfit muy cómodo.
Mencionó que tal mal estaba en ese momento, que un año después se enteró que su esposo había cremado a su hijo y guardó el secreto.
“(Me dijo) ‘Tengo yo las cenizas’, respondí ‘o sea cómo’, (Martín contestó) ‘sí, es que no te quise decir porque te vi tan mal que no te quise decir de esto’. Pero a él tocó esa parte, ya después decidimos hacer un ritual con el bebé como para despedirnos de él, fue bonito”.
Expresó que sus hijas Jacky y Carolina saben que tuvieron un hermano, pero Renata no porque está muy chiquita, “y lo que me partió fue ver la película de Coco, y que me dijeran ‘que bueno que le puse una concha y un juguete, para que mi hermano jugara cuando viniera a nuestro altar’, que me dijera eso Jacky fue impresionante”, comentó.
Un nuevo temor
Ahora que se encuentra embarazada de gemelas tuvo el presentimiento que por su edad, sus hijas a quienes llamará Emilia y la otra falta que su esposo decida el nombre, tuvieran síndrome de down, por lo que tuvo que hacerse una prueba de amniocentesis y el resultado fue positivo.
“Fue muy difícil el proceso como se manejaron las cosas con la doctora, yo no entendía lo que me estaba diciendo, pero gracias a Dios con mis princesas, y creo que fue una llamada de Diosito, valora que ahí están tus hijas, no importa que sean niñas, pero que estén bien”, ahondó en su necedad de tener nuevamente un hijo.
Será en diciembre si todo marcha en orden que nazcan las nuevas integrantes de la familia cuidándose con el mayor reposo posible para que lleguen con bien y están pensando que sea en Estados Unidos para tener la doble nacionalidad.
Lo que si dejó claro es que con este último embarazo cerrará la fábrica de los bebés.
“Por supuesto, me lo tatúo, te lo firmo con sangre no quiere tener más. Me voy a operar y quiero que él se opere porque el otra vez me contaron que una señora operada se embarazó y casi me da un infarto, por eso mejor los dos”, expresó la ex conductora de La Voz México.
