Por CARAS México @CARASmexico
Carolina Kabande y Jorge Hank Rhon están celebrando su primer año de casados. Fue la socialité quien a través de su cuenta Instagram compartió una foto del día de su boda para recordar ese día tan especial para ella. “IX • VII • MMXVIII . Un año junto a un rey, mi rey”, escribió Kabande. Pero, ¿cómo se conocieron? Carolina reveló a Caras México en su edición de abril de 2019 el día que ella y Jorge se enamoraron.
“Cuando llegué a Tijuana, estuve manejando el Grill, un restaurante de mi padre. Jorge dice que me echó el ojo ahí por primera vez, aunque yo ni en cuenta (risas). Yo ya lo conocía, pero nunca habíamos interactuado mucho, lo ubicaba como el papá de mis amigos (risas). Desde que éramos adolescentes me llevaba mucho con sus hijos, Carlos Andrés y Ana. ¡Nos la pasábamos en fiestas y albercadas en su casa (risas)! Mi esposo y yo nos conocimos formalmente este verano pasado (2018) en el Club Hípico Caliente Jockey Club, durante un clásico.
“Yo estaba con mi mejor amiga en mi palco y Jorge estaba comiendo con sus amigos en un restaurante de mi familia, mi papá les estaba llevando a su mesa unas langostas gigantes. Después me habló para avisarme que estaban comiendo y preguntarme si quería ir yo también. Cuando llegué, Jorge me dijo: “Siéntate aquí”, refiriéndose a que me sentara junto a él (risas). Desde ese día hemos sido inseparables, fue algo instantáneo. “Lo chistoso es que antes me burlaba cuando escuchaba historias así, pensaba que era imposible sentir un flechazo inmediato con alguien hasta que lo conocí. Sentimos una conexión muy fuerte. Fue un amor muy inesperado. Siempre fui esa persona que decía que yo no me iba a casar y que no iba a tener hijos. Hoy tengo hijos, esperando dos más en camino, estoy casada y enamorada de mi esposo, soy inmensamente feliz y agradecida por mi familia”, compartió en la entrevista.
Luego de aquella vez, siguieron en contacto pero ya más privado, pues el padre de Carolina no la dejaba salir con él. “Empezamos hablando de manera privada porque mi papá no me dejaba salir con él (risas). Cuando conocí a Jorge nos quedamos platicando desde la una de la tarde hasta las dos de la mañana, realmente se dieron las cosas por nuestra química y empatía, sin embargo, más que nada a él lo distingue el protocolo de un gran caballero, un gran señor. “Llegué a mi casa y mi papá, quien siempre ha sido muy “easy going” pero muy protector, me regañó por haber llegado a esa hora. Por lo regular nunca le daba pleito, más que cuan- do quería algo de verdad. Cuando quiero algo lo hago y no le pido permiso a nadie, eso fue lo que pasó con Jorge. Me deje llevar por mi instinto y lo que sentía. Él nunca me pidió como tal que fuéramos novios, tiene 63 años y ya no somos unos quinceañeros (risas)”, compartió. Luego de varias citas y de enamorarse cada día más, la pareja decidió dar el siguiente paso y casarse.
Jorge sorprendió a Carolina al pedirle matrimonio. De una manera muy original, el empresario le entregó a su novia el espectacular anillo de compromiso con un perro xoloitzcuintle, que tenía el anillo colgado a un listón rojo amarrado en el cuello del cachorro. Luego la boda llegó la boda civil a la que estuvieron invitados 120 personas; posteriormente tuvo una gran boda a la que asistieron 700 personas. “Tuvimos dos bodas. Primero, nuestra boda civil en el rooftop del hotel K Tower, el 7 de septiembre. Fue algo mágico, porque nos casamos con todos mis números, que son el 7, el 11 y el 23. Escogimos el día 7 de septiembre sin pensarlo, luego elegimos la luna llena del 23 de noviembre para la boda formal, que fue en el hotel Lucerna, de Ensenada. Las dos noches fueron inolvidables”, nos contó.