Carlos Slim Helú, el hombre más rico de México y uno de los más acaudalados del mundo, es conocido por su sencillez y austeridad.
A pesar de su enorme fortuna, Slim no presume de lujos extravagantes y prefiere un estilo de vida discreto. Esto se refleja en sus propiedades, que, si bien son imponentes, no ostentan la opulencia que se podría esperar.
La residencia principal en Las Lomas de Chapultepec
Contrario a lo que muchos podrían esperar de un magnate, la casa de Carlos Slim en Las Lomas de Chapultepec no destaca por su opulencia, sino por su sobriedad y su enfoque en el arte.
Esta zona residencial, una de las más exclusivas de la Ciudad de México, ha sido su hogar durante décadas. La propiedad es notablemente austera para un multimillonario, decorada con obras de arte significativas como un cuadro de La Sagrada Familia con María Magdalena de El Greco, entre otras piezas de Pissarro y Rodin. La casa, que cuenta con seis habitaciones, también fue el hogar de su difunta esposa, Soumaya Domit, y en ella crecieron sus seis hijos.
La única mansión privada en la Quinta Avenida de Nueva York
Además de su residencia en México, Slim es dueño de la única mansión privada en la Quinta Avenida de Nueva York, adquirida en 2010 por 44 millones de dólares. Esta impresionante propiedad se extiende a lo largo de 1,900 metros cuadrados con ocho pisos, 12 habitaciones y 10 baños completos.
Situada en el distrito de Manhattan, frente al Central Park y el Museo Metropolitano de Arte, la mansión fue construida en 1901 con un estilo Beaux-Arts, donde destaca por sus techos altos con paneles de madera tallada a mano y detalles en oro.
La casa de Elizabeth Taylor
Otra notable adquisición de Slim fue la casa en Manhattan donde Elizabeth Taylor vivió con su tercer esposo, Michael Todd. Slim compró esta propiedad en 2011, el mismo año en que falleció Taylor, por 15.5 millones de dólares, por debajo del precio original de 18 millones.
La mansión, construida en 1903, cuenta con seis pisos; los cuatro primeros destinados a locales comerciales y los dos últimos a oficinas, además de un amplio jardín privado.
La filosofía de vida de Carlos Slim
A pesar de su considerable fortuna, estimada en 62.8 mil millones de dólares, Slim ha expresado en diversas ocasiones su preferencia por una vida sin excesos ostentosos. En entrevistas, ha comentado que buscó un hogar que fomentara la unión familiar, más que el lujo desmedido. Este enfoque también se refleja en su interés por el arte y la cultura, aspectos que considera esenciales para la educación y el desarrollo personal.
Las propiedades de Carlos Slim más que una muestra de su éxito financiero, son el reflejo de sus valores personales y su pasión por el arte y la cultura. Aunque posee mansiones en algunos de los lugares más exclusivos del mundo, estas se caracterizan más por su significado cultural y su funcionalidad que por un simple despliegue de riqueza.
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