La cabeza de la Iglesia católica, el Papa Francisco, y su antecesor, el Papa Benedicto XVI, han recibido su primera dosis de la vacuna para el coronavirus según informó el Vaticano ayer por la tarde. El vocero de la ciudad confirmó en una conferencia de prensa que podía confirmar que “dentro del programa de vacunas del Estado de la Ciudad del Vaticano, hasta la fecha se ha administrado la primera dosis de la vacuna Covid-19 al Papa Francisco y al Papa Emérito”.
La Ciudad del Vaticano inició su programa de vacunación el miércoles pasado, implementando un centro médico en el auditorio principal donde el pontífice normalmente realiza sus audiencias semanales. Debido a su edad, ambos líderes religiosos están bajo mayor riesgo de contraer el virus. Se desconoce la fecha exacta en que el Papa Francisco, de 84 años, y el Papa Benedicto XVI, de 93 años, habrían recibido sus dosis pues no venía establecida en el comunicado. Recientemente, el Papa Francisco habló sobre las vacunas en un esfuerzo por impulsar que más personas se inoculen. En su mensaje navideño, pidió a los países que se aseguraran de que esta llegara a todos
“Ruego a todos los encargados de los estados, de las empresas, de los organismos internacionales ... que promuevan la cooperación y no la competencia. Que busquen una solución para todos, vacunas para todos, especialmente para los más vulnerables y necesitados en todas las regiones del mundo,”, expresó durante su tradicional mensaje Urbi et Orbi. Durante el fin de semana, insistió que es una obligación ética tras el fallecimiento de su doctor personal desde 2015, Fabrizio Soccorsi, por complicaciones relacionadas con el virus. “Es una acción ética, porque estás jugando con tu salud, estás jugando con tu vida, pero también estás jugando con la vida de los demás,” explicó el Papa Francisco.