Hace unas semanas, el hotel ZEL, Mallorca, acogió su evento inaugural que celebró el nuevo proyecto creado por Gabriel Escarrer y el tenista Rafa Nadal. ZEL tiene el propósito de llevar la esencia de la vida mediterránea a los mejores destinos del mundo.
En una entrevista con CARAS, el empresario habló sobre el primer hotel en la conocida playa de la isla de Mallorca: Palmanova.
¿Cómo surgió la alianza entre Meliá y el tenista Rafa Nadal?
Rafa y yo nos conocemos desde hace tiempo, cuando compite suele alojarse en nuestros hoteles y es un placer tenerlo con nosotros. Siempre habíamos soñado en hacer un proyecto juntos y hace alrededor de un año nos sentamos con un buen café y empezamos a poner en común lo que nos gusta hacer cuando viajamos. Y es lo mismo.
De ahí surgió la idea de diseñar un modelo de hotel con todo lo que nos gusta de nuestra “casa mediterránea” y lo que queremos hacer cuando estamos de vacaciones con nuestra familia o nuestros amigos. Meliá siempre se ha diferenciado por su fuerte carácter de empresa familiar, y en cierto modo, con ZEL buscamos también hacer un proyecto “de familia a familia”, que sea un embajador de nuestra cultura y nuestras raíces mediterráneas.
¿Qué representa para ustedes como empresa esta alianza?
Esta alianza es un claro ejemplo de “win-win”, por cuanto viene a sumar, a la trayectoria y reputación del Grupo Meliá Hotels International como líderes en gestión hotelera, el liderazgo global e inspirador de un icono multi-generacional como es Rafael Nadal,
Además, para nosotros representa un orgullo y una gran responsabilidad: por una parte, el tener a Rafa Nadal como partner, pues no solo es un icono del deporte, sino una gran persona con la que es un placer trabajar, que despierta entusiasmo y orgullo de pertenencia entre todos los participantes en el proyecto, y por otra, sentimos gran responsabilidad debido al fuerte compromiso que asumimos con la familia Nadal y con todos nuestros grupos de interés y los clientes que confían en nosotros para visitar los hoteles ZEL.
¿Por qué decidieron llevar a cabo este proyecto en Mallorca?
Nadal es una marca mundial y Mallorca, también; además de ser la “cuna” y la “casa común” de nuestras dos familias, Mallorca es también una referencia mundial del turismo vacacional, y la playa de Palmanova, donde se ubica el ZEL Mallorca, es una de las más hermosas y conectadas de la isla. Por ello hemos querido que comenzara rodar en esta isla, pero el proyecto es internacional, ya que la marca ZEL nace con vocación de expandirse a los mejores destinos vacacionales y ciudades “bleisure”(Con un componente de ocio) del mundo, y justamente esta semana estaremos anunciando el primer hotel ZEL que se abrirá en México, el hotel ZEL Sayulita.
¿Cuál es el común diferenciador de este hotel?
ZEL viene a ocupar un nicho que no estaba cubierto por otras marcas, el de un hotel que sea un “hogar mediterráneo” para sus huéspedes, que evoque el modo de vida de una casa mediterránea, con un patio como corazón y centro de conexión del hotel, y otros espacios como terrazas, roof tops o Beach clubs, protagonistas de la vida al aire libre. Además, los hoteles priorizarán los materiales orgánicos, un diseño relajado, gastronomía local, y experiencias compartidas y vibrantes. Creemos que hay una demanda creciente de hoteles que promuevan la interacción social y las experiencias vinculadas al entorno local, que realmente enriquezcan la estancia de los clientes.
Creo sinceramente que entre ambas partes hemos conseguido dotar a la marca de una propuesta real de valor y experiencias, con la garantía de excelencia en la gestión y en el servicio personalizado que aporta Meliá, y con el poderoso componente aspiracional aportado por Rafa Nadal y su entorno mediterráneo.
Platícanos sobre el proceso de creación del hotel, ¿qué es lo más especial?
Yo diría que para llegar a la creación del primer hotel de la marca ha habido dos grandes momentos en el proceso: por una parte, la creación del concepto, que ha sido sumamente apasionante y enriquecedor, con muchas reuniones, muchos “brainstormings” y mucho estudio hasta definir como sería una nueva marca de hoteles que representara la esencia mediterránea, la que también nos representa a nosotros, y surgió el concepto de ZEL que hoy es ya una realidad.
El segundo momento ha sido el del diseño del proyecto del hotel, las obras, la contratación y training del personal, tanto en el servicio como en la “cultura” de esta nueva marca, la captación de los mejores partners en alimentos y bebidas, como Beso Beach, o en experiencias, y en todas ellas se ha implicado Rafa Nadal, al igual que yo mismo, de una forma muy personal y directa. Para mí, lo más especial de este primer ZEL es la energía que se ha conseguido crear en los espacios del hotel, con el gran patio central como conector de interiores y exteriores, la luz, la brisa, la música. todo ello atrae y cautiva a los clientes, y todo ello se refleja en definitiva en el éxito de este concepto.
¿Qué ha sido lo más retador de este proyecto?
Para las compañías hoteleras, el “primer hotel” de una marca es siempre un reto enorme, pues además de que todo debe funcionar y responder a las expectativas creadas, es visto siempre como un “showcase” al que mirarán no solo los clientes o huéspedes potenciales, sino propietarios de hotel e inversores potenciales que pueden ayudarnos con la expansión de la marca. Además, en este caso teníamos una “presión” añadida, debido a la notoriedad de la figura de Rafa Nadal, que había multiplicado la expectación existente en prácticamente todo el mundo, en torno a su nuevo proyecto hotelero.
¿Cómo fue la aportación creativa de Rafa Nadal para crear el hotel?
Rafa Nadal se implicó mucho, sobre todo en la primera parte o “definición del concepto”, que es un proceso netamente estratégico y creativo. Es obvio que Rafa no ha tenido mucho tiempo en su agenda y no ha podido estar involucrado en el “día a día” de la creación del primer hotel ZEL, pero ha sabido rodearse de un magnífico equipo que le conoce bien, ha viajado con él por todo el mundo, y sabe qué le gusta cuando viaja, como le gusta desconectar, relajarse, y disfrutar, y ellos sí han participado de todo el proceso y lo han ido chequeando con el.