Muchas mujeres terminan en prisión por relaciones violentas y codependientes de sus parejas. Raquel Aguirre, Mercedes Becker, Daniela Ancira y Wendy Balcázar crean este nuevo proyecto para darle voz a aquellas que son las menos escuchadas, las mujeres privadas de la libertad.
Wendy Balcázar, Raquel Aguirre y Daniela Ancira son egresadas de Derecho por la Universidad Anáhuac México Norte y Mercedes Becker es psicóloga y maestra en Psicoterapia Clínica Integrativa por la Universidad Anáhuac, sin duda la mejor combinación para iniciar esta organización. Nos comentan cómo inicia La Cana, “inicia en el 2013 en la carrera, con un programa de asesoría jurídica gratuita en los penales, visitamos las cárceles y aprendimos que todo cuesta adentro, desde artículos de higiene personal, recibir visitas, una almohada, entre otros. La Cana se constituyó en el 2016, surge como una organización para llevar actividades productivas a prisión, para brindar fuentes de empleo que les permitan a las mujeres tener un ingreso dentro de prisión. Vimos que muchas de ellas ya sabían tejer, buscamos traer un producto comercial, con más diseño, que los hagan adentro y lo vendiéramos afuera”, comenta Daniela.
Tras ver tanta falta de apoyo ellas decidieron no limitarse en sólo darles trabajo en la cárcel, nos comenta Raquel, “vimos tanto abandono y necesidad. Por eso decidimos brindar salud mental, clases de arte, cultura, deporte y educación. Cuando empezaron a salir de las cárceles, inauguramos el programa de “Seguimiento en libertad”. También tenemos un área de incidencia en políticas públicas, en donde precisamente uno de los frutos es el libro y el programa “Proyecto libertad”, en donde nos encargamos de defender causas justas de las mujeres privadas de la libertad”.
El día de ayer lanzaron su primer libro “Acusáis a la mujer sin razón”, un extracto de 33 entrevistas que realizaron en varios estados de la republica para buscar qué lleva a las mujeres a delinquir y atacar el problema de raíz, su descubrimiento fue tan impactante que lo quisieron perpetuar en este libro nos comenta Raquel, “nos dimos cuenta de que no sólo la pareja cumple un rol importante en la comisión del delito, también está la violencia estructural que inicia desde su niñez, que después la replican con su pareja y al llegar a la cárcel se sigue generando este ambiente con custodios, autoridades y hasta las mismas compañeras reclusas. Lo peor es el sistema de justicia, que debería de tener una perspectiva de género, pero parece que es todo lo contrario. Hoy está comprobado estadísticamente, que a las mujeres se les impone una pena más alta que a los hombres por el mismo delito y hay más mujeres sin sentencia dentro de las cárceles”.
Este libro de la editorial Penguin es un grito de todas esas mujeres que tienen la necesidad de ser escuchadas de primera mano y antes no habían tenido la oportunidad de ser escuchadas, nos comenta Mercedes qué podemos esperar de este libro, “creo que es importante leer las historias con una mente abierta, dejando el juicio a un lado y entender el contexto del que vienen, para poder entender las causas que la llevaron a estar ahí. Es un libro fuerte, pero tan fuerte como la realidad de nuestro país”, finaliza.