Con un estilo innovador y llamativo gracias a sus vestidos y accesorios, Natalia Bravo dirige su propio negocio enfocado en la moda y en las mujeres empoderadas desde hace más de siete años, por esto, se convierte en nuestra emprendedora de la semana. A pesar de las dificultades que trajo la pandemia, Natalia sacó adelante su negocio, mejor conocido como “Mulier”. Con la ayuda de sus padres emprendedores, logró explotar su creatividad dentro de cada proyecto.
Por Karen Huerta Arceo
NATALIA BRAVO
¿Cómo nació Mulier?
N.B: Yo trabajaba en Movistar en la parte de mercadotecnia, ya empezaba la venta en línea, es decir, el e-commerce ya tenía reacciones aquí en México. Una amiga de la Universidad me habló con la idea de emprender, decidimos abrir una tienda de ropa, y se me ocurrió la idea de abrirla online. Abrimos nuestro e-commerce, un reto muy fuerte ya que tuvimos que salirnos de nuestros trabajos actuales y viajar a Estados Unidos para comprar más de dos mil vestidos y comenzar el emprendimiento. Conforme pasó el tiempo nos dimos cuenta de que, en ese entonces, ya hace 8 años, el mercado mexicano no estaba listo para comprar en línea, y menos vestidos. Decidimos hacer un showroom para presentar la marca de forma presencial y es ahí donde nace Mulier.
¿Qué te impulsó a crear tu propio emprendimiento?
N.B: Aunque todos los emprendedores digan que eres libre con tus horarios y tienes más tiempo para ti, la verdad es que no, tener tu propio negocio es complicado y cada día se presenta una nueva complicación. Uno de los motivos por las cuales quise emprender, fue mi papá, ya que el es emprendedor y ha sido una guía muy fuerte para mí. Desde chica soy súper arriesgada, el decir “voy con todo” lo hago por mí y para mí.
¿Cómo lograste posicionar tu marca en el mercado?
N.B: Realmente todo ha sido de boca en boca y después de la pandemia logramos impulsarnos más en el mundo de los medios y las redes sociales. Yo siempre me estoy capacitando con cursos en diseño textil y tendencias de imagen, me encargo de estar siempre presente en la tienda para dar una atención personalizada a la gente que venga a Mulier. Creo que el que la gente vea eso y vea el estilo de nuestros vestidos, da mucho de que hablar de una forma positiva.
¿Qué te motiva a seguir con tu emprendimiento?
N.B: Cuando las personas me escriben para agradecerme, cuando me mandan fotos felices con algún vestido, o cuando me dan una retroalimentación que me ayuda para mejorar. Me encanta también trabajar con las chicas que me ayudan aquí, formamos un equipo increíble.
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¿Cuál ha sido el mayor reto dentro del tu emprendimiento?
N.B: La separación con mi socia y crecer el negocio. Llegamos a tener más de cinco tiendas, me di cuenta de que el expandirse, no siempre es realmente crecimiento, este se consigue de otra forma y en mi caso fue brindar exclusividad y atención muy personalizada. Obviamente la pandemia también fue de los retos más grandes, tuvimos que cerrar todas nuestras tiendas y adentrarnos de nuevo al e-commerce.
¿Qué no puede faltar en Mulier?
N.B: Un buen vestido, felicidad y diferentes diseños que cuidan el medio ambiente. Cada cuerpo es diferente y algunas veces es difícil encontrar el patronaje perfecto, he podido contar con la ayuda personalizada de mi mamá, junto con su equipo de costureras me ayudan a ayudar a las mujeres que quieren arreglar el vestido que les gusta quede perfecto a su medida.
¿Qué consejo le darías a los que buscan emprender en el mismo ámbito?
N.B: No se fijen tanto en la competencia, siempre crean en sus selecciones y en sus proyectos, vean hacia adelante y confíen en ustedes. Te puede interesar: Secretos para emprender tu propio negocio Las CARAS del emprendimiento: Natalia Bravo