Quiénes fueron los abuelos de Claudia Sheinbaum, la nueva presidenta de México

La actual presidenta de México tiene una historia familiar de resiliencia y adaptación, reflejo del país mismo

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La familia de Claudia Sheinbaum llegó a México en la migración judía que huyó de los horrores de la guerra

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La ascendencia de Claudia Sheinbaum, quien recién fue nombrada como primera presidenta de México, se encuentra profundamente enraizada en historias de migración y supervivencia. Sus abuelos, tanto paternos como maternos, originarios de Lituania y Bulgaria respectivamente, llegaron a México huyendo de los conflictos y persecuciones en Europa durante la primera mitad del siglo XX.

¿Quiénes son los abuelos paternos de Claudia Sheinbaum?

Del lado paterno, Claudia es nieta de Chone Juan Sheinbaum Abramovitz y Emma Yoselevitz Bruk, quienes emigraron de Lituania. Se establecieron en México, donde se integraron en la comunidad y contribuyeron al tejido social y económico del país.

El padre de Claudia, Carlos Sheinbaum Yoselevitz, nacido ya en México, creció en el seno de una familia que valoraba la educación y el activismo, pronto se convirtió en un reflejo del compromiso de sus padres con la justicia social, aspecto que evidentemente influyó en la actual presidenta.

¿Quiénes son los abuelos maternos de Claudia Sheinbaum?

Por el lado materno, sus abuelos, Josiff (José) Pardo Benjaminoff y Mati (Magdalena) Cemo, fueron judíos sefardíes de Bulgaria que también encontraron en México un refugio seguro, después de huir de de los horrores de la Segunda Guerra Mundial. En México, finalmente se establecieron y prosperaron.

Su madre Annie Pardo Cemo, nació en la Ciudad de México, y ha sido una gran influencia en la presidenta. Es una figura prominente en el campo de la academia y la ciencia, su formación y carrera se centraron en la biología y la bioquímica, campos en los cuales ha hecho significativas contribuciones.

¿Cuál es el impacto de la herencia familiar en Claudia Sheinbaum?

La familia de la primera presidenta de México no solo le proporcionó un nombre y una herencia cultural, también impregnó en ella valores de resiliencia y compromiso social. Tanto los Sheinbaum como los Pardo se integraron plenamente en la sociedad mexicana, dedicados al comercio lograron contribuir al desarrollo económico y cultural de su nueva patria.

A través de estas influencias familiares, Claudia Sheinbaum ha heredado no solo una mezcla de culturas y tradiciones, sino también un profundo sentido de responsabilidad social y política. La historia de sus abuelos y la diversidad de su herencia han jugado un papel crucial en la formación de sus ideales y en su enfoque hacia el liderazgo, marcando el comienzo de una nueva era en la política mexicana con una líder que lleva el legado de la diáspora judía y su historia de supervivencia y adaptación.

Hoy, Claudia Sheinbaum lleva con orgullo su herencia como la primera presidenta de México de ascendencia judía, algo que refleja la historia de integración y contribución de su familia en el país. Su ascendencia no solo define una parte de su identidad, también resalta la historia de un México multicultural y acogedor.

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