La familia Jenkins ha sido una de las más influyentes en el estado de Puebla, México, tanto por su notable contribución al desarrollo económico y cultural de la región como por las polémicas que han rodeado a sus miembros en los últimos años.
Su historia comienza con William Oscar Jenkins, un estadounidense originario de Tennessee, Estados Unidos, que llegó a México a principios del siglo XX y cuya visión empresarial le permitió amasar una considerable fortuna al encontrar en Puebla un terreno fértil para sus negocios.
Inició en la industria textil y expandió sus intereses al sector inmobiliario y cinematográfico, incluso llegó a monopolizar las salas de cine en México
La familia Jenkins, un imperio empresarial y filantrópico
Jenkins construyó un imperio que incluía cines, bancos y otras empresas. También fue un importante filántropo que creó la Fundación Mary Street Jenkins en honor a su esposa.
Esta fundación ha sido un pilar en la promoción de la educación y la cultura en Puebla, financiando proyectos e instituciones como la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
Además, ha contribuido al bienestar de las comunidades más desfavorecidas, mejorando el acceso a servicios básicos como el agua potable.
La disputa por la herencia
Tras la muerte de William O. Jenkins en 1963, el patriarca no dejó herencia a sus descendientes. En cambio, dejó su legado a la fundación
Esta decisión generó descontento entre algunos miembros de la familia, quienes buscaron formas de extraer recursos de la fundación, contra sus estatutos originales. Este conflicto derivó en acusaciones de malversación de fondos y lavado de dinero, que involucró incluso a autoridades estatales.
Un legado empañado
La situación alcanzó un punto crítico cuando se revelaron las actividades ilícitas de ciertos miembros de la familia Jenkins, lo que llevó a la Fiscalía General de la República (FGR) a iniciar investigaciones y emitir órdenes de aprehensión. Esto provocó que algunos implicados huyeran del país, dejando un manto de duda sobre el futuro de la fundación y el legado de Jenkins.
Sin embargo, algunos miembros de la familia continúan con las actividades de la fundación, tratando de preservar su legado filantrópico. Las aportaciones en áreas como la educación, la salud y la cultura siguen siendo fundamentales para el desarrollo de Puebla.
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A pesar de la compleja historia de la familia Jenkins, la Fundación Mary Street Jenkins continúa siendo un pilar en la comunidad, reflejando el impacto duradero de William O. Jenkins en Puebla.
