Ya lo sabíamos, pero si hacían falta más pruebas ahora el arzobispo que ofició la boda de Meghan y Harry ha desmentido una de las afirmaciones que hicieron en su entrevista con Oprah Winfrey. Durante la charla televisada, la duquesa aseguró que realmente se casaron en privado tres días antes de su ceremonia en Windsor. Sin embargo, desde entonces se ha revelado el acta de su matrimonio, con la fecha del 19 de mayo de 2018. El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, también ha confirmado que el duque y la duquesa de Sussex no estaban casados legalmente antes de su boda televisada. La entrevista incluyó muchas revelaciones, sumando la noticia de que la pareja había intercambiado votos en privado unos días antes de la ceremonia.
“Sabes, tres días antes de nuestra boda, nos casamos”, dijo Meghan a Oprah. “Nadie lo sabe. Los votos que hemos enmarcado en nuestra habitación son solo de nosotros dos en nuestro patio trasero con el arzobispo de Canterbury”. La duquesa no dio más detalles sobre el servicio privado, pero muchas personas dedujeron que no era legalmente vinculante debido a la ausencia de testigos. “La boda legal fue el sábado. Firmé el certificado de matrimonio, que es un documento legal, y habría cometido un delito grave si lo hubiera firmado sabiendo que era falso”, explicó el arzobispo. “Interprétenlo como gusten. Pero la boda legal fue el sábado, y no diré nada sobre lo que sucedió en ninguna reunión anterior”, agregó el arzobispo.
Meghan Markle y el Príncipe Harry se casaron en la Capilla de San Jorge en Windsor, convirtiéndose en los duques de Sussex. Sin embargo, en enero del año pasado, la pareja anunció que dejaría sus puestos como miembros de alto rango de la familia real. Actualmente viven en California, donde han logrado alianzas lucrativas a través de su propia casa productiva, además de la entrada del príncipe como ejecutivo a un start-up tecnológico.
