Este fin de semana, se reportó que uno de los miembros de la familia real española había sufrido un accidente que requirió de atención médica al momento. Se trata de Miguel Urdangarin, hijo de la infanta Cristina y sobrino del rey Felipe VI, quien vivió una serie de complicaciones durante su último viaje para practicar esquí.
Así ocurrió el aparatoso incidente de Miguel Urdangarin en Suiza
De acuerdo con información recabada por Hola España, al momento del accidente, Miguel se encontraba en una zona exclusiva de Suiza, destino al que arribó para poner en práctica sus habilidades esquiando.
Debido a que el hijo de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin tiene amplia experiencia con esta disciplina, se aventuró a elegir las llamadas “pistas negras” como el escenario de su día de entrenamiento, sin embargo, las condiciones propias de estos terrenos jugaron en su contra esta ocasión y dieron como resultado una aparatosa caída.
Las denominadas “pistas negras” poseen pendientes considerablemente mayores a otras categorías, pudiendo incluso tener una inclinación de hasta 50% según los parámetros de medidas. También cuentan con cambios abruptos rasantes, término que se le da a los desniveles, y numerosos baches o “bumps”, es decir, pequeñas montañas de nieve formadas naturalmente.
Todos estos obstáculos deben ser superados con pericia y sumo cuidado, por lo que únicamente se recomienda que personas experimentadas en esquí ingresen a este tipo de áreas. No obstante, tal como ocurrió con Miguel Urdangarin, la práctica no garantiza la ausencia de accidentes.
Lo que se sabe sobre el diagnóstico y recuperación del hijo de la infanta Cristina
Mientras realizaba algunas de las maniobras previstas en su rutina, el joven de 21 años que recién el año pasado concluyó sus estudios en Ciencias del Mar, experimentó una caída en una de las pistas a las que accedió. Esta maniobra habría resultado en una lesión en la rodilla, misma que según reportes, debido al tipo de impacto podría requerir de una intervención quirúrgica en los próximos días.
Por esta razón, la infanta Cristina ha tenido que reacomodar su agenda y liberar varios pendientes, para así poder permanecer en la ciudad de Ginebra mientras se determina qué tan necesaria es esta cirugía, misma que por su naturaleza deberá llevarse a cabo en Suiza, evitando así traslados que puedan agravar aun más la lesión de Miguel Urdangarin.
