El yate Dannebrog no es solo una embarcación, sino una extensión del esplendor real danés sobre las aguas. Este palacio flotante sirve como residencia oficial y privada para los reyes Federico X y Mary de Dinamarca, quienes lo utilizan para sus visitas oficiales y vacaciones privadas.
Una gira anunciada a un mes de reinado
Tras haber pasado un mes desde la abdicación de la reina Margarita en favor de su hijo Federico, la Casa Real danesa ha revelado la agenda de los nuevos monarcas para la próxima primavera.
La agenda oficial de los reyes incluye visitas a Suecia y Noruega en mayo, destaca aquí su debut conjunto como monarcas. Estas visitas, además de fortalecer las relaciones entre las monarquías del norte, incluirán encuentros con los actuales soberanos y los herederos al trono.
Posteriormente, el Dannebrog llevará a los reyes a las islas Feroe y Groenlandia, territorios autónomos de Dinamarca, donde experimentarán la belleza y la singularidad de estos lugares a bordo de su residencia flotante.
Te puede interesar: Esta es la fortuna que Travis Kelce pagó para que su familia y la de Taylor Swift disfruten juntas el Super Bowl
Te puede interesar: Miley Cyrus, más enamorada que nunca: este es el importante paso que dio en su relación con Maxx Morando
Características del yate real Dannebrog
El Dannebrog, construido entre 1931 y 1932 en el Astillero Naval de Copenhague, mide 78 metros de eslora y sirvió como reemplazo de una antigua embarcación real.
Su diseño, que incluye una proa de color blanco adornada con remaches dorados y dependencias reales en la popa, refleja la grandeza y la tradición de la realeza danesa. Además, la cubierta se utiliza para recepciones oficiales, ofreciendo vistas espectaculares durante los eventos.
Compuesta por miembros de la armada danesa, la tripulación del Dannebrog ha llevado a la familia real no solo a los confines de Dinamarca, sino también a destinos tan lejanos como Francia, el Mediterráneo, el Caribe y la Costa Este de América del Norte.
Dannebrog: más que un yate, un emblema real
El Dannebrog no es solo un medio de transporte para los reyes de Dinamarca, sino un símbolo de la herencia y la continuidad real.
Este “palacio flotante” permite a Federico y Mary llevar la presencia y la elegancia de la corona danesa a través de los mares, reforzando lazos diplomáticos y celebrando la rica historia marítima de Dinamarca. Con cada viaje, el Dannebrog escribe un nuevo capítulo en la historia real danesa, navegando con la gracia y la dignidad que caracterizan a la monarquía de este país nórdico.