Por Bang Showbiz @CARASmexico
La mudanza de los duques de Sussex a Los Ángeles se ha visto empañada por una inesperada polémica: este fin de semana, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, publicó un tuit que arrancaba con él presentándose como un gran admirador -y amigo personal- de la reina de Inglaterra para dar después un giro de 180 grados y arremeter contra el nieto de la soberana. Según el polémico mandatario, su país no cubrirá el coste del dispositivo que vaya a garantizar la seguridad del matrimonio y de su hijo de 10 meses en su nuevo hogar. "¡Tendrán que pagar!”, añadía para cerrar su mensaje. https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1244338645198352386?s=20 La respuesta del príncipe Harry y su esposa Meghan Markle no se hizo esperar y el domingo emitieron un comunicado a través de un portavoz con el que han informado de que no tienen ninguna intención de recurrir a las autoridades estatales. “Ya se ha llegado a los acuerdos necesarios para costear su seguridad con fondos privados”, han aclarado. El dispositivo de escoltas que acompaña a la pareja allá donde va ha sido una fuente constante de problemas desde que anunciaron su decisión de desvincularse del núcleo duro de la monarquía británica. Oficialmente, Harry y Meghan dejarán de ser “royals seniors”, es decir, parte del grupo de miembros de la familia real que actúan en representación de Isabel II, este 31 de marzo.
En febrero, Canadá -donde se instalaron tras abandonar Inglaterra a finales del año pasado- anunció que dejaría de ofrecerles las medidas de protección que habían venido recibiendo “de forma intermitente” a través de la Real Policía Montada, a petición de la Policía Metropolitana de Londres, debido al cambio en su rango. Lo cierto es que el traslado de los duques a la Isla de Vancouver colocó al gobierno canadiense en una situación "única y sin precedentes”, según la definieron fuentes oficiales, pero en aquel momento Harry y Meghan todavía contaban con el estatus de ‘Personas con Protección Internacional’ y, como tal, tenían derecho a recibir asistencia en Reino Unido o en el extranjero por razones de seguridad.