Los rumores sobre la cena de Navidad y Año Nuevo de la familia real británica y la invitación que supuestamente le realizó la reina Isabel II a la mamá de Meghan Markle, Doria Ragland, comenzaron a circular en las últimas fechas. Todo apuntaba a que esto podría darse este año en Sandringham, pues la duquesa de Sussex está embarazada y estas fechas son ideales para pasarla en familia. Además, el príncipe Harry es sin duda un fanático de su suegra, a quien ha calificado de “asombrosa” en una entrevista. También el Príncipe Carlos parece ser aficionado a Ragland.
Doria Ragland, la ausente
Pero si todo indicaba a que Doria estaría con la familia real británica estas navidades, ¿por qué no caminó junto a ellos en la caminata anual a la iglesia de Santa María Magdalena? De acuerdo a varios expertos reales, esto era poco probable que sucediera o que estuviera planeado alguna vez. Según comentó Duncan Larcombe al Daily Mail, la posibilidad de que Ragland pudiera estar invitada a Sandringham no era posible. “No creo que haya ninguna verdad en esa historia”, dijo a inicios del mes.
“La sangre que corre por las venas de la realeza es la sangre de la tradición. Representan todo lo que es tradicional. Y la reunión de Sandringham en la Navidad de la Reina siempre ha sido solo para la familia inmediata”, comentó. Por ejemplo, Carole y Michael Middleton nunca han estado “invitados a unirse a la familia real en Navidad en Sandringham. Volviendo a la princesa Diana, su madre, incluso cuando era viuda, nunca fue invitada”, explicó. “Y eso no sería un desaire para ella. Es solo que son fanáticos de la tradición en la familia real”, aseveró. La duquesa de Sussex continúa rompiendo la tradición en la familia real, pero considera esta prueba de que algo todavía es sagrado para la realeza.