El esposo de la monarca ha protestado durante años por no haber sido nombrado rey, sino sólo Príncipe consorte de Margarita II.
El príncipe Henrik de Dinamarca, esposo de la reina Margarita II, ha causado escándalo al anunciar que no quiere ser sepultado junto a la monarca.
La Reina tiene un sarcófago especialmente diseñado para la pareja en la catedral de Roskilde, donde descansan los restos de la familia real danesa desde 1559, pero el Príncipe, de 83 años, anunció que no será sepultado junto a ella.
Lene Balleby, vocera de la Casa Real de Dinamarca, dijo al tabloide danés BT que Henrik, quien nació en Francia, ha estado insatisfecho por años con su papel y el título.
Al ascender al trono en 1972, Margarita se convirtió en la primera monarca de Dinamarca en siglos, sin embargo el nombramiento no fue del todo satisfactorio para Henrik, pues se ha quejado por no haber obtenido él el título de rey.
“La decisión de no ser enterrado junto a la reina es la consecuencia natural de no haber tenido un trato igualitario en relación a su esposa?, dijo Balleby según lo citaron.
“Cualquier hombre que no es igual a su esposa no merece ser enterrado en la misma tumba?, dijo Henrik el viernes, de acuerdo con el tabloide Ekstra Bladet.
Un cambio en la constitución danesa en 1953 permitió una sucesión femenina, lo que abrió el camino para que Margarita se convirtiera en monarca. Pero incluso antes de que eso ocurriera, Henrik no se habría convertido en rey.
La Casa Real informó que la reina Margarita, de 77 años, ha aceptado la decisión de Henrik y señaló que sus planes de sepultura siguen igual.
Henrik informó a través de la Casa Real que sí quiere ser sepultado en Dinamarca, aunque no detalló dónde exactamente.
El Príncipe, cuyo nombre de pila es Henri Marie Jean Andre de Laborde de Monpezat, conoció a Margarita en Londres cuando era un diplomático de la embajada francesa. Para su matrimonio, tuvo que cambiar su nombre a Henrik (Enrique en danés), además de convertirse a la iglesia luterana, y finalmente obtuvo el título de príncipe consorte. La pareja tiene dos hijos, el príncipe heredero Federico y el príncipe Joaquín.