Por Bang Showbiz @CARASmexico
La reina Isabel II se instalará una semana antes de lo que suele ser habitual en su calendario en el castillo de Windsor, donde acostumbra a pasar las vacaciones de Semana Santa, para adaptarse a las últimas medidas establecidas por el gobierno británico ante la crisis del coronavirus, que obligarán a recluirse en sus casas a los mayores de 70 año o a las personas con sistemas inmunológicos comprometidos a partir de la semana que viene. Como miembro de este grupo de riesgo, Isabel II ha cancelado las apariciones públicas que tenía previstas para las próximas semanas para reducir al mínimo el riesgo de contagio y en parte también porque se da por sentado que su estancia en Windsor se alargará más de lo habitual, aunque las audiencias con el primer ministro y otras personalidades relevantes siguen en pie.
En la práctica, esta decisión -que han confirmado desde la casa real este martes- implica que el próximo 9 de abril no se celebrará el tradicional servicio religioso del jueves santo en la capilla de San Jorge, la misma en que contrajeron matrimonio los duques de Sussex, y las tradicionales fiestas que suele presidir sobre estas fechas en el jardín de Buckingham en honor de distintas asociaciones también se han cancelado. Tampoco visitará la exposición floral de Chelsea, una de las citas anuales favoritas de la soberana que organiza la Real Sociedad de Horticultura en mayo y que ha sido aplazada indefinidamente. Todos esos eventos implicaban reunir a un número considerable de invitados, lo que contraviene las recomendaciones de las autoridades sanitarias de evitar aglomeraciones.