Meghan Markle y el Príncipe Harry han sido una de las parejas más polémicas de la monarquía británica, pues desde 2020 el príncipe y su esposa iniciaron su proceso de renuncia al tratamiento de alteza real y dejaron de ser sustentados económicamente por la Corona.
Desde hace varias semanas, la pareja atraviesa rumores de divorcio, y se especula que la crisis matrimonial ya no tiene marcha atrás, por lo cual, estarían a un paso de hacer oficial su separación.
Como era de esperarse, sería uno de los divorcios más caros, pues según medios europeos, Meghan exigiría la cifra de 80 millones de dólares por firmar los papeles de la disolución del matrimonio, cantidad con la que el Rey Carlos III estaría en completo desacuerdo.
Otra cuestión con la que el rey diferiría, es con la custodia de los hijos de la actriz de 41 años, Archie y Lilibeth, pues como era de esperarse, ambos entrarían en disputa por quedarse con los niños.
El rey Carlos III, por otro lado, le habría dicho a Harry que podría recuperar sus privilegios reales una vez que firme el divorcio.
¿Y la mansión?
Según fuentes allegadas a la pareja, Meghan Markle y Harry quieren poner a la venta su mansión en Montecito, California, y estarían pidiendo una cantidad de 12 millones de euros por la propiedad en el exclusivo vecindario.
Ésta es una decisión que ambos contemplan desde antes que surgieran los rumores sobre su divorcio, debido a las diferencias con sus vecinos, quienes piden privacidad, mientras que la famosa pareja atrae a los paparazzi día con día.
Además, Meghan desea regresar a la actuación, así que ha contemplado mudarse a Malibú, para tener más libertad e impulsar su carrera en el cine y la televisión.
Habrá que esperar hasta que el divorcio sea oficial y se dé a conocer información sobre los acuerdos a los que llegaría la controvertida pareja para saber cómo quedan repartidas las propiedades y los derechos sobre los menores.