La marquesa de Griñón Tamara Falcó y el empresario Iñigo Onieva se casaron en una ceremonia romántica y emotiva oficiada por el padre Cruz, guía espiritual de Tamara.
La boda valorada en más de medio millón de euros tuvo lugar en el Palacio de El Rincón, residencia de reyes y último hogar de Carlos Falcó, situada en la localidad madrileña de Aldea del Fresno.
Pese a su separación por infidelidad de Iñigo, la pareja se dio una segunda oportunidad y llegó al altar protagonizando la boda del año en España.
Tamara lució un vestido “muy royal”, de Carolina Herrera, adornado con velo y tiara; un diseño nupcial inspirado en el de Grace Kelly.
A la boda asistieron los familiares y amigos más cercanos de la pareja, entre ellos destacaron las hermanas de Tamara, su madre isabel Preysler, así como los padres y hermanos del novio. Carolina Molas, madre del novio fue la madrina, encargada de llevar a Iñigo al altar. Manuel Falcó, hermano mayor de Tamara llevó al altar a la novia debido a la ausencia de su padre. El gran ausente fue el cantante y hermano de Tamara, Enrique Iglesias, quien decidió no asistir, debido a que no le gustan las bodas, según declaró Julio Iglesias Jr.
La preboda de Tamara Falcó e Iñigo Onieva
Previo a su boda, la pareja tuvo una emotiva velada en el Hotel Mandarin Oriental Ritz de Madrid, a la que asistieron cerca de 200 invitados que se diviertieron al ritmo del grupo musical Los Alpresa. Tamara eligió un traje blanco hecho por ella misma y en sus redes sociales compartió un vistazo de la noche.
Por su parte, Iñigo Onieva publicó una imagen de la celebración y dedicó un mensaje a Tamara Falcó antes de que se convirtiera en su esposa.
“Hoy comienza nuestro viaje juntos y no puedo ser más feliz de tenernos el uno al otro para juntos hacer frente ante cualquier obstáculo de la vida. No existe mejor equipo, juntos nos completamos y obtenemos el equilibrio que en solitario jamás podríamos alcanzar. Gracias por tanto y por lo que viene. Te quiero”, expresó.