Recientemente hemos visto historias de ficción basadas en personas reales, como la reciente producción de “La reina Charlotte: Una historia de Bridgerton”, que cuenta la historia de la reina Carlota de Mecklenburgo-Strelitz nació en Mirow, actual Alemania, en 1744, quien existió en la vida real, aunque bajo otros contextos.
Ahora en la reciente premiación de Cannes vuelve a surgir una historia de época que trajo de nuevo a los escenarios al actor estadounidense Johnny Depp, quien a pesar de tener un futuro incierto en su carrra cinematográfica después de su batalla judicial con su exesposa Amber Heard, nuevamente retoma fuerza gracias a esta cinta.
“Jeanne du Barry”, cinta que abrió el festival de Cannes de 2023, cuenta la historia de Jeanne Bécu, la hija de una costurera empobrecida que se convirtió en la última amante oficial del monarca francés, cuyo personaje principal está interpretado por Maïwenn, la actriz francesa que también escribió y dirigió la película.
Además, marca el regreso en la carrera de Johnny, siendo la primera película del actor en francés, dando vida al rey Luis XV. Según la sinopsis, la historia cuenta la vida de Jeanne Vaubernier, una joven de clase trabajadora, hambrienta de cultura y placer que usa su inteligencia y encanto para subir, uno por uno, los peldaños de la escala social, continuando su paso hasta convertirse en la amante favorita del rey Luis XV, quien, sin conocer su condición de cortesana, recupera con ella su apetito por la vida.
Esto nos hace pensar, ¿quién fue la verdadera Jeanne Du Barry?
Se dice que Luis XV, quien fue rey de Francia desde 1715 hasta su muerte en 1774, estuvo casado con la polaca Marie Leczinska, y tuvo una serie de aventuras a lo largo de su vida, siendo Jeanne su última amante antes de morir, de quien se enamoró perdidamente.
Jeanne Becú nació en 1743 en Vacouleurs, y fue la hija ilegítima de Anne Bécu, una costurera de 30 años. Estudió en un convento llamado Couvent de Saint Aurea, donde permaneció hasta los 15 años, cuando se consideró que había alcanzado “la mayoría de edad.”
Durante un tiempo se dedicó a vender baratijas a las calles de París, fue también asistente de un peluquero, empleada de una mercería y hasta dama de compañía de una anciana viuda, hasta que su vida dio un giro de 360 grados al conocer al conde Guillaume du Barry.
Du Barry era dueño de un casino, y cuando conoció a Jeanne en 1763, quien se muestra como una mujer rubia, de ojos azules y muy atractiva, en pinturas; fue lo que le llamó la atención al conde, y la convirtió en su amante. Ya con el nombre de Mademoiselle Lange, trabajó como prostituta de nobles, ministros y altos funcionarios de la corte de Versalles.
Muy pronto Jeanne acumuló una enorme clientela aristocrática, con amantes que incluían desde los ministros de Luis XV hasta sus propios cortesanos. Jean Baptiste du Barry, hermano de Guillaume, la llevó en 1768 a Versalles, donde Jeanne captó la atención de Luis XV, quien ya prácticamente era un hombre solo, pues la reina Marie estaba muriendo.
Cuando el rey Luis XV se enteró del pasado de la joven como prostituta, le ordenó casarse con un hombre de alcurnia para limpiar su imagen, y que pudiera tomar el puesto de su amante principal. Todo se resolvió rápidamente con su matrimonio con el conde du Barry, y finalmente fue presentada ante la corte el 22 de abril de 1769.
El hermano del conde du Barry, Jean Baptiste, se encargó de colocarle un “tutor” para ayudarla a dejar atrás su pasado y aprender una conducta digna de la corte.
Jeanne se acostumbró rápidamente a vivir en el lujo de Versalles, donde pasaba sus días recibiendo a amigos, costureras, joyeros y artistas que esperaban venderle sus trabajos, pues le gustaban las cosas extravagantes como vestidos, peinados y joyas de grandes proporciones.
Tenía además un impresionante séquito a su servicio, y con su título de “maitresse-en-titre”, era prácticamente la reina de facto de Francia, y por lo tanto la mujer más poderosa del país. Esto le ocasionó a la vez muchos enemigos en la corte, y durante la Revolución Francesa todo acabaría para Madame du Barry.
Fue arrestada en 1793, y un tribunal la acusó de traición por lo que fue condenada a muerte, a pesar de sus intentos para salvarse revelando el lugar donde había escondido sus joyas y regalos que le había regalado Luis XV. El 8 de diciembre de 1793 fue decapitada en la guillotina, y se dice que sus últimas palabras fueron: “Le ruego, señor verdugo, deme solo un momento más”.
