La imagen de la princesa Leonor de Borbón se ha convertido en el gancho de estafadores en redes sociales que utilizan la inteligencia artificial para pedir dinero.
Aunque la heredera al trono de España no tiene cuenta oficial de TikTok, hay muchísimas cuentas haciéndose pasar por ella para estafar a personas en todo el mundo, sobre todo en Latinoamérica.
Los ciberdelincuentes se ayudan de la inteligencia artificial para hacer videos falsos de la princesa de Asturias y con esto captar la atención de sus víctimas.
¿Cómo funciona la estafa de la falsa princesa Leonor?
Los delincuentes difunden en redes sociales un video falso en el que la hija mayor del rey Felipe VI promete una cuantiosa ayuda económica a todo aquel que la solicite, pero para recibirla aseguran que solo hay que pagar “una pequeña tasa” de unos cientos de dólares a cambio de presuntamente recibir miles de dólares.
“Soy la princesa Leonor, el tiempo de registro es solo en 24 horas. Registre su nombre a través de mi perfil de TikTok”, dice la falsa heredera en uno de los videos generados con inteligencia artificial.
El uso de IA permitió que los estafadores crearán imágenes y audios muy convincentes que simulaban a la princesa Leonor hablándole a la cámara, lo que aumentó la credibilidad del fraude.
Entonces, la estafa consiste en difundir una falsa imagen de la princesa Leonor prometiendo dinero a quien lo requiera a cambio de una serie de pagos y las víctimas hacen esos pagos sin recibir nada a cambio, confiados en que es la hija del rey de España quien les habla.
Víctimas de la estafa de la falsa princesa Leonor
Un reportaje de Pablo Cantó en el diario El País desenmascaró esta estafa, en la que decenas de cuentas falsas en TikTok con la imagen de la princesa Leonor prometen dinero a cambio de una serie de pagos.
El mencionado reportaje citó a una de las estafadas en Guatemala, que confesó que terminó endeudada tras caer en esta trampa: “Me mandaron un mensaje en TikTok diciéndome que la que me hablaba era la princesa Leonor, que había ganado 100 mil dólares, pero que tenía que pagar un impuesto de 2,200 quetzales (unos 5 mil 765 pesos mexicanos) para liberar el dinero… creí que era cierto”.
Origen de esta estafa
Según narró Pablo Cantó, Martín Turrado contó en su libro ‘Estudios sobre Historia de la Policía y Gentes de Malvivir’, que esta estafa inició a principios del siglo XIX con el nombre “El tesoro escondido”, donde le hacían creer a la víctima que había un tesoro enterrado y que, si ayudaba económicamente a desenterrarlo, se le daría parte del botín.
Este timo se extendió debido a que, durante la Guerra de Independencia Española (1808-1814) se corrió el rumor de que la gente enterraba sus pertenencias para evitar que el ejército de Napoleón se las quitara.